Mi mente estaba en blanco, solo miraba el techo, aquel frio que recorria la habitacion y esas blancas paredes recorriendo mi vista, me hicierón sentir extraña.
Trato de moverme pero solo pienso en lo inutil que me siento, estoy tan debil que no puedo siquiera ahogar una palabra. Trato de recordar lo ultimo que vive en mi memoria, pero al mismo tiempo tengo miedo.
No se cuanto tiempo ha pasado desde que me encuentro aqui, solo deceo que esto termine pronto, más por que de verdad tengo una hambre mas inmensa que el de un vegano de comer carne, quisiera poder sentir la brisa del viento o el calor del sol, mirar la luna y darle gracias a dios por un día más, poder decirle a mamá que la quiero y tambien poder frecuentar esos lugares que tanto me gustan, ir en metro y no sentirme sola, poder tomar una ducha, quiero tantas cosas. Y te quiero ati.
