Un regalo en Corea. Jungkook x Reader.

Capítulo 1.

Ahí estabas. Todavía no podías creer que por fin pudieras ir a un concierto de BTS. Habías estado ahorrando durante un par de años para poder ir de viaje a Corea y poder verlos. Sabías que muy posiblemente no vendrían a España, así que te hiciste un propósito. Si ellos no venían, irías tú.

Estabas muy nerviosa. El tiempo pasó muy lento hasta que empezó el concierto. Te alegrabas de haber aprendido coreano y poder hablarlo fluidamente, porque gracias a eso pudiste entender casi todo lo que decían los chicos. Cantaste, bailaste, conociste gente también de España e incluso te quedaste con sus números para no perder el contacto. Un rato después comenzaría el fanmeeting.

Entraste en una sala en la que había una mesa. Esperaste un poco en la entrada junto con tus nuevos amigos que conociste previamente en el concierto, hasta que se escucharon gritos que ya resultaban muy familiares.

Los chicos entraron en la sala, se sentaron y miraron en la dirección de las fans con una gran sonrisa. Tú fuiste la primera en pasar. Empezaste a caminar hacia la mesa, estabas súper nerviosa, y los chicos no tardaron en notarlo.

El primero era Rap Monster.

–Hey, ¿te lo has pasado bien en el concierto? – Te dedicó una sonrisa, intentando hablar de forma casual para calmar tus nervios, y por supuesto, lo consiguió.

–Me lo he pasado muy bien, ha sido genial estar aquí. – Sonreíste cálidamente, lo que provocó una sonrisa más amplia en el rostro del chico.

–¡Me alegra oír eso! No eres de Corea, ¿verdad? es una pena que hayas tenido que venir desde tan lejos para vernos, pero por otro lado me siento muy feliz de que hayas venido. Un viaje tan largo no se hace por cualquier persona. – Rap Monster realmente apreciaba a sus fans, y lo demostraba preocupándose por ellas.

–Soy de España. Llevamos mucho tiempo pidiendo conciertos allí, pero por lo que parece no va a poder ser... así que me propuse hacer un "pequeño viaje." – Soltaste una risita, y él te sorprendió revolviéndote el pelo de forma cariñosa mientras reía.

–Bueno, quien sabe, a lo mejor nos tienes allí en algún momento...pero hasta entonces te tocará esperar. – Te guiñó un ojo. – Supongo que no querrás una photocard mía...– Te miró sin dejar de sonreír, pero era obvio que no se sentía bien al decir eso. Conocías de más y de sobra cómo se comportaban muchas fans, las que habían provocado que Rap Monster dijera ese tipo de cosas. Pero tú habías venido a verlos, y no te irías sin un recuerdo de todos y cada uno de ellos, porque los querías muchísimo a todos.

–Es obvio que la quiero. – Le sacaste la lengua en un gesto burlón y él se sorprendió. Cogió una foto suya y la firmó, entregándotela y dejando que te hicieras un selfie con él.

Te despediste de él y avanzaste un poco, encontrándote con Jin. Te acercaste con un poco más de confianza y apoyaste tu barbilla sobre tus manos, que a su vez se apoyaron en la mesa. No pudiste evitar mirarlo con ternura.

Jin estaba sentado en la mesa tranquilamente, abrazando a un peluche de alpaca. Cuando se percató de tu presencia, se inclinó hacia adelante, acercó el peluche a tu rostro y comenzó a moverlo delante de él. Te recordó a un niño pequeño, por lo que empezaste a reír, provocando que él también acabara riendo.

–¿Te gustan los peluches de alpaca verdad? – Ni siquiera preguntó por el concierto, ya que había escuchado anteriormente lo que hablaste con Rap Monster.

–¡Mucho! Pero son muy caros...– Te lamentaste mientras acercabas una de tus manos para acariciar el peluche. Jin sonrió y te dio un golpecito con la boca del peluche en tu pelo, y lo dejó en la mesa delante de ti.