Llueve sobre mí
Desearía que fuese fresca agua
Pero no
Llueven sobre mí los recuerdos
Cayendo
Uno
A
Uno
Sobre mi frente
Inundándome
¿Por qué resultan tan crueles ahora?
Si alguna vez fueron dulce alegría
Ningún paraguas puede detenerlos
Porque caen como el más corrosivo ácido.