'-Así que definitivamente no eres humano.-dije-.Eres un ángel caído.Un chico malo.
Eso le arrancó una sonrisa.
-¿Crees que soy un chico malo?
-Te apoderas de los cuerpos de la gente.-
Asintió.
-¿Y también quieres apoderarte del mío?
-Quiero hacer todo con tu cuer....'
-¡_____! Deja de leer.-Ordenó mi encantadora madre mientras hablaba con mi hermano.
-Mmmm...no.-Contesté obvia.
-Anda levantate del suelo y ayudame enana.-Dijo mi hermano sosteniendo una caja donde ponía ´No tocar´.Le hice caso y cogí una caja que contenía videojuegos y libros míos,ya sé que soy una chica pero eso no me impide jugar a videojuegos.Subí los pequeños escalones que me dirigían a una casa,actualmente,mi casa.No se ve tan mal,la cocina es tipo americana,conecta con el salón,en la entrada hay un pequeño pasillo y una puerta al final de este,que supongo que sera el armario para los abrigos.En la planta de arriba hay cuatro puertas,supongo que seran nuestras habitaciones y la que queda será la sala de invitados.
-_______ ¿que tal si salimos a dar una vuelta y así conocemos la ciudad?-Preguntó mi hermano,interrumpiendo mi guía turística por la casa.
-Claro tendré que conocer mi ciudad.-Dije con aire de superioridad.
-No es tu ciudad mocosa.-Dijo Josh saliendo de casa y abriendo la puerta de su BMW.
-Ya lo veremos.-Murmuré mientras cogía la chaqueta y saliamos de alli rumbo a no sé donde.
**
Llevábamos 20 minutos peleándonos,porque el simio que tengo por hermano se ha perdido y no lo quiere admitir.-Si hubieramos cogido la moto.-Dije irritada.
-Si claro y tengo que ir agarrado de tu cintura como si fuera una nenaza,mientras tu te pasas del límite de velocidad.-Gritó.
-¿Acaso no eres una nenaza?.-Pregunté haciendo enfadar a mi hermano.De pronto,escuche música y mire a mi alrededor,había una discoteca no muy lejos de donde estábamos,se me pasó una idea por mi cabeza,si iba a ser mi ciudad tendría que conocer primero a la gente que hay aquí.Salí del coche y por supuesto,mi hermano también,cuando llegamos a la puerta alguien la abrió haciendo que esta me golpeára y yo cayera al suelo.
-¡Idiota ten más cuidado!-Grité.El chico se giró,la verdad era bastante sexy,ojos celestes,pelo negro,un pearcing en la oreja,no llevaba camiseta,solo una chaqueta de cuero negra que combinaban con sus botas y pantalones negros.El mismisimo Adonis.
-Oh,caras nuevas.-Dijo el chico sonriendo de lado.
-Oh,un imbécil nuevo.-Dije imitando su voz,mi hermano soltó una risilla.
-Mira nena te voy a advertir una cosa,no te metas con el jefe si no quieres salir de aquí.-Me amenazó.Espera.¿Amenazandome a mi?Ni de coña.
-Oye no vayas de chulo,que seguro que eres un niñito de mamá.-Le dije,si seguía así iba a echar humos por las orejas.
-Creo que no has oído hablar de mi,soy Chad,el jefe de esta ciudad,todos los habitantes de Brest me conocen,no he escuchado cosas muy buenas de mi,excepto que soy sexy y si quieres seguir con vida yo que tú no me hablarías.-Dijo,¿qué se cree este?.
-Cariño,no te tengo miedo.-Escupí.
-Deberías.-Dijo.
-Estúpido.
-Malcriada.
-Egocéntrico.
-Idiota.
-Putón.
-¿Este es el momento en el que yo te beso y nos juramos amor verdadero?Porque nena si crees que soy así espera sentada.-Preguntó con una sonrisa pícara y escuche a mi hermano estallar a carcajadas,mierda,no me acordaba que estaba ahí.
-Yo tampoco soy así,espero no verte mas idiota.-Dije mientras me subía al coche.Llevo menos de un día aquí y ya le tengo asco a esta ciudad y a sus habitantes,me replantearé lo de dominarla.Estoy tan sumergida en mis pensamientos que no me doy cuenta que hemos llegado a casa.Me dirijó a mi habitacion y veo que no hay ningún rastro de cajas,abro los armarios,la ropa bien colocada-gracias mama-pensé.Me duché,me puse el pijama y me tiré en la cama dispuesta a dormirme.
**
-¿Papá? Papá no te vayas quedate conmigo,te hecho de menos,mira en lo que me he convertido.-Lágrimas empezaban a descender por mi cara.
-Cariño yo ya me he ido.-Dijo.
-¿Pero por qué sigo soñando contigo?-Pregunté como una niña pequeña.
-Tal vez tu corazón este vacío y cuando encuentres a alguien que te de amor como yo te lo dí dejarás de so.....-
-¿Papá?
-Siempre te amaré.
-¡PAPÁ!-Me levanté sobresaltada,estaba sudando mucho,me dirigí al baño y me lavé la cara,acto seguido me apoye en el lavabo y me miré al espejo.
-Tal vez tu corazón este vacío.-Repetí las palabras que mi padre me dice todas las noches y sonreí,mamá cree que ya no tengo estos extraños sueños.Miro la hora,las siete de la mañana,bajó a la cocina ya que no tengo hambre y me encuentro a mi madre y mi hermano desayunando.
-¿Pero qué hacéis a esta hora levantados?-Pregunte con el ceño fruncido.
-Cariño se me olvidó decirte que empezábais hoy el recreo,así que venga a vestirse y preparar las cosas.-Me dio un pequeño empujón para que me sentara y desayunara.Hoy iba a ser un gran día,notese la ironía.
**
-Ala si que es grande este instituto,pelirroja.-Dijo mi hermano mirando el gran edificio que teníamos en frente.Exacto era pelirroja,con ojos verde y mediana de estatura,todo lo contrario a mi madre y mi hermano que tenían el pelo rubio y los ojos celestes.
-Cierra la boca que te entran moscas.-Dije sonriendo mientras entraba en el instituto y perdía de vista a mi hermano.
-Ho-hola.-Escuche una voz dulce detrás de mí.Me giré y pude ver a una chica morena con ojos marrones y una vestimenta muy parecida a la mia.
-Hola.-Dije cortante.
-Mi-mierda es q-que aquí los nu-nuevos nunca son simpáticos.-Masculló la chica mirando al suelo,yo no puede evitarlo y me reí.
-La verdad ser simpática no va con mi personalidad,soy ______ Smith ¿y tú eres?-Me presenté.
-Lena Elliot.-Dijo extendiendome la mano,pero yo no se la estreché.
-En mi ciudad no nos estrechamos la mano,lo vemos muy cortés.-Dije.
-Ah bueno como eres nueva te acompañare a secretaría para que cojas los horarios.-Dijo mientras me agarraba del brazo.
-No has tartamudeado.-Dije.
-Ah eso,pues...la verdad no me relaciono con nadie y cuando vienen gente nueva me gusta ponerma en plan actriz,el año pasado me disfracé de gótica y asuste a un chico,pero hoy no sabía que venía alguien nuevo y por eso no estoy disfrazada.-Dijo riéndose mientras le decía algo a una anciana que se encontraba detrás de un mostrador.
-Eres rara,muy rara.-Dije.
-Hola nena.-Susurró alguien en mi oído.
Mierda.