Y ahi estaba yo, de vuelta mirándole el bulto a mi profesor. Es que, era inevitable, usaba pantalones sueltos y aun así se le notaba el paquete (que era demasiado grande). Mi profe estaba demasiado bueno de la cintura para abajo. Pero bueno, la cuestión de esto es la siguiente:
Un día yendo al colegio se me ocurrió la idea de engañar a mi profesor para poder ir a su casa (vive a 2 cuadras del colegio), espere a que finalizara el día y corrí para salir antes que el. Me agache a la vuelta del colegio y comencé a llorar, él paro y me pregunto que pasaba, le digo "mi mamá se enojo y dijo que no me quería volver a ver", en lo que el dice que si quería podía ir a su casa. En el camino me dijo que no estaba su mujer, ya que se iba a quedar en el trabajo hasta tarde. Llegamos y me pregunto si quería agua, le dije que si y en cuanto se fue a la cocina tire la mochila y me saque la ropa lo más rápido que pude quedando en ropa interior. Cuando volvió de la cocina y me vio se me acerco y me pregunto que que estaba haciendo, no les respondí.
Lo agarre y lo tire al sillón que estaba detrás de él de forma que quedara sentado. Me subí encima suyo y lo bese al principio se resistía, pero luego me siguió el beso. Sin dejar de besarlo le desabroche la camisa y los pantalones. Comencé a besarle el cuello y fui bajando. Llegue a el borde del bóxer y le pase la lengua por el borde de este, cuando le baje el bóxer reaccionó y dijo que estaba mal lo que estábamos haciendo. No le di importancia y lo bese, cuando se volvió a relajar, yo le sentía la pija bien dura de tanto que me sobe contra ella. De la nada le agarro la pija y me subo en el metiendome su verga hasta los huevos. Empeze a moverme rápido hacia arriba y hacia abajo mientras él jugaba con mis pechos, estábamos por llegar cuando se escuchan las llaves de la casa, yo seguia concentrada en lo que hacia pero el quería parar. Yo le dije que de la puerta a donde estabamos había un largo trecho y seguí el estaba preocupado pero se que lo estaba disfrutando la manera en que su verga se hinchaba cada vez mas dentro de mi me lo decía, en el momento en que llegamos al maravilloso clímax ambos gritamos, lo que hace que se escuchen pasos corriendo hacia donde estabamos.
Termine agarrando mis cosas y saliendo desnuda por la ventana de la habitación en la que estábamos y él no se que habrá hecho pero yo ya había cumplido mi cometido.