Quiero verte, la necesidad de verte me mata, tengo ganas de susurrarte al oído que eres lindo y sobre todo decirte lo que tanto querías oír: Te amo.
Todavía tengo en la mente ese día, ese momento en el que nuestras vidas se separaron, lo lamento, l...
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Me quedé sintiendo el tacto de la lluvia sobre mi mientras lloraba y miraba a BaekHyun acercarse a mí para cubrirme totalmente con al paraguas.
No hice nada más que seguir el movimiento de su cuerpo con mis ojos y verlo acercarse de a pocos, no sabía como había llegado ahí él ni como el destino había hecho que nos encontráramos. Me sentí inmensamente ridícula e insignificante a su lado con las lágrimas recorriéndome el rostro pero nada me importó.
Sentí su cuerpo acercarse al mío y todo lo que en ese momento necesite se vio sucumbido ante su abrazo, todo mi cuerpo sintió calma y mi cerebro dejó de pensar en palabras sin sentido, solo lo aferré a mí lo más fuerte que pude y solté el sollozo que tenía atrapado en la garganta y que no dejé salir por la sorpresa.
Tranquila –oí su susurro.
A BaekHyun no le importó mojar su saco de paño, al contrario estaba al parecer preocupado por mí, se alejó para verme a la cara y con una mano sostuvo una de mis mejillas para verme de cerca. Pensé que iba a besarme por lo que me separé dando un paso atrás, BaekHyun solo sonrió de medio lado y esta vez dirigió sus labios a mi frente.
Será mejor que te acompañe a casa –dijo mientras me miraba.
Su tono se mantuvo calmado y eso ayudó a mi agitado corazón a sentirse en paz, asentí mientras bajaba la vista y me dejaba abrazar por los hombros para ir a paso lento, la lluvia me haría resbalar.
BaekHyun sostuvo el paraguas lo bastante alto como para que ninguno de los dos se mojase, de todas maneras me mantuve cerca de él, estaba segura que iba a coger un resfriado luego de esto por lo que lo mejor sería irme en un taxi a casa para que pudiese cambiarme de ropa.
Cuando levanté el rostro para cruzar la avenida me di cuenta de que estábamos frente a una camioneta negra último modelo, miré esta vez a BaekHyun y lo vi mover entre sus llaves el seguro, lo presionó y al instante pude ver las luces encenderse entre la lluvia.
Sube –dijo mientras se acercaba a la puerta del copiloto.
Solo asentí y entré al auto que olía a pino y estaba segura que era de él porque tenía su aroma impregnado en todos lados, miré hacia el frente y mis ojos siguieron sus pasos, al instante entró tirando el paraguas en la parte trasera.
