Capitulo 2

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Abrí la puerta con lágrimas en los ojos y abrace a mama con todas mis fuerzas apenas la vi.

–Que te pasa? Mi amor que te paso!?

Mire hacia donde ella estaba mirando y vi las marcas que mariano me había dejado en los brazos.

–Lali quien fue!? -Pregunto ya mas alterada-
–Sentate primero

Ambas nos sentamos en el sofá y decidí empezar a hablar.

–Me pelee con mariano -Dije por fin-
–Fue él el que hizo, lo tengo que matar!
–Mama, mama tranquilizate, no quiero que hagas nada, no quiero que tengas que ver con esa basura ni vos ni nadie
–Que fue lo que te hizo?

Le conté todo.

–No puedo soportar que nada ni nadie te haga algo así -Dijo con lágrimas en los ojos-
–Ya lo se, te amo
–Te amo... Nunca permitas que nadie te pegue mi amor, mucho menos que te diga la cantidad de cosas que te dijo, y muchísimo menos que te diga que sos una puta, porque NO lo sos
–Ya lo se ma... No quise nunca que esto pasara, te lo juro mama
–Obvio que no mi amor
–No pude hacer nada, siento que soy la peor persona de este mundo, siento que no pude una sola vez con algo
–Shhh no no no no, la peor persona de este mundo es el mi amor, vos no tenes la culpa de que el sea como es
–Ya lo se pero las cosas pudieron ser muy distintas si yo se que es celoso! Podría... No se haberme alejado de benjamín, es cierto que estábamos muy cerca, pasábamos horas hablando de todas las cosas que tenemos en común, podría no haberme puesto a ensayar la escena con Martín, no se algo podría haber echo
–Hija, hija, a ver... El no va a cambiar la formar de ser aunque vos cambies la tuya! Vos sos como sos, y si sos así con tus amigos no tenes porque cambiarlo por un idiota... Vos sos como sos, ÉL fue el que te quiso cagar, vos no tenes nada que ver... Nunca más permitas algo así... Ni físico -Dijo acariciandome el brazo- Ni verbal -Me miro a los ojos-
–Te amo ma
–Te amo Lalita

Me abrace a mi mama y llore como una nena chiquita toda la tarde.

–Voy a estar bien, te lo prometo
–Por favor cuidate
–Si ma, estoy bien
–Te amo
–Yo mas mami

Me abrazo y cerré la puerta de mi departamento luego de que mi mama la cruzara para volver a casa.

Me senté en el sillón y las lágrimas volvieron a mi cara; tantos recuerdos, tantas emociones, tanto era lo que habíamos vivido ahí que se me hacia muy difícil no recordarlas a cada instante. Volví a llorar abrazada a mi almohada y recordé lo pasado hace horas antes.

●      ●      ●

Me vi a mi misma acostada en mi cama, durmiendo. De repente escuche ruidos afuera, me asuste, agarre cualquier cosa para golpearle al que fuera que estuviera ahí. Salí hacia el living y vi a mariano parado frente a la puerta con un cuchillo en la mano. Me quede paralizada.

–Perdoname mi amor -Dijo acercándose a pasos agigantados hacia mi-

Cerré los ojos temiendo lo peor que se me cruzo por la cabeza y volví a abrirlos. Me desperté sobresaltada, empapada en traspiración, me baje de la cama y salí corriendo a prender todas las luces de la casa. Mis lágrimas salían cada vez que prendía una nueva luz, recordandome aquella horrible y extraña pesadilla. Recorrí el departamento entero y no había nadie en la casa. Llegue al baño completamente destruida de nuevo, sentia que todo me molestaba, sentia que quería arrancarme todo mi cuerpo y mi piel y ponerme en el cuerpo de alguien que no la estuviera pasando mal.

Sin pensarlo dos veces, agarre la tijera apoyada en el estante del baño y me corte el flequillo. No me importaba, no me importaba nada, necesitaba sentirme bien conmigo misma, no me importaba si quedaba horrible o simplemente no se notaba, necesitaba hacerlo. Salí del baño, dejando todas las luces prendidas y volví a acostarme en mi cama, con muchísimo miedo.

Me desperté a la mañana siguiente con el peso de una pésima noche y prepare mi desayuno. Trate de poner musica para distraerme pero no pude, me era imposible. Alguien toco mi puerta y mire por el agujerito antes de abrirla, ya estaba demasiado traumada.

–Cande... -Suspire pesadamente-
–Amiga que te pasa!? Que te paso en el flequillo?
–Pasa

O cosas de la vida, o de mi madre mejor dicho, o intuición de cande, pero lo cierto es que cande se sento en sillón y me miro para que comenzara a hablar.

–DONDE ESTA!? DONDE ESTA QUE LE CORTO LA CHOTA!?

Me reí.

–No se ni donde esta ni quiero saberlo, no quiero que nadie que amo tenga que ver con este boludo, dejalo
–Te hice reír -Sonrió ella-
–Sos una hueca, te amo
–Yo te amo mas gordita

Me quede toda la tarde viendo películas con cande. Me preocupaba que los rumores de separación no paraban de hablarse, quien mierda se había enterado tan rápido para empezar el rumor de esta manera!?

Suspire, harta de todo, mire a mi costado y cande dormia como un oso. Solté una breve risita y le acaricie el brazo. Me di vuelta y saque el cuaderno y mi lapicera de mi cajoncito de la mesa de luz. Prendí mi velador y me desvele por unos cuantos minutos.

"Tal vez, llorar, ya no nos alcanza, tal vez, solo hay, miedo a la distancia, miedo que nos hace ver, sin sentir, ohh...

No voy, a hablar de lo que has vivido, solo pedir quedate conmigo, se que para ti no es fácil olvidar, ohh"

La luz del otro velador se prendió y Cande se dio vuelta.

–Que estas haciendo despierta a esta hora?
–Escribo, igual se me acabaron las ideas

Ella se rió.

–Puedo leer?
–Mmm todavía no, pero por ahí dentro de poco si

Ella se volvió a dar vuelta feliz de lo que había escuchado y volvimos a dormir.

Casualidades | LaliterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora