...pero tampoco puedo olvidarlo.

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A veces, me invade la melancolía
y mi corazón desea ser atravesado por un puñal.
A veces, después de tanto pesar
esos recuerdos siguen en mi día a día.

¿Qué?¿Qué es eso tan malo?
No lo sé, no puedo recordarlo.

A veces, escucho unas lágrimas
un llanto que sigue sin cesar.
A veces, un estoque de luz, un haz
que me ataca cual esgrima.

¿Cuándo?¿Cuándo hiciste eso tan malo?
No lo sé, no puedo recordarlo.

A veces, pienso en que la maté
y la destrocé como nadie.
A veces, deseo enterrarme
y para siempre desaparecer.

¿Dónde?¿Dónde hiciste eso tan malo?
No lo sé, no puedo recordarlo.

A veces, siento tocar un río de sangre,
sangre de mi amada, manchado de carmesí.
A veces, pienso dejar de vivir
y que este sufrimiento se marche.

¿Cómo?¿Cómo hiciste eso tan malo?
No lo sé, no puedo recordarlo.

Sufrimiento que aflora en mi interior,
que no olvida nada de lo que pasó.
¿POR QUÉ?¿POR QUÉ OCURRIÓ ESO TAN MALO?
No lo sé, no puedo recordarlo...

...pero tampoco puedo olvidarlo.

Palabras de un compositorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora