Capitulo 3: comenzó el juego.

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-Fui rápidamente al hospital, con la esperanza de que me diera un abrazo y que me diera sus últimas palabras.

-Al llegar, busque al doctor más cercano que hubiese para que trasladara a Daniel a urgencias. 

- Hola, soy el doctor Mauricio Duque.

-Hola soy Monica Fuentes, puede llevar a urgencias a mi novio, se encuentra grave y necesito su ayuda ¿pueden hacer algo?

-Hija, no podemos hacer nada, tú novio ya está muerto y no ay nada que hacer, lo siento, me tengo que ir, que tenga feliz noche.

-Vaya mi hermana está muerta y ahora Daniel, mi día no pudo ser peor, mañana toca enterrar a la persona con la cual e estado desde niña y pase mis noches y tristezas, todo por un maldito secreto.

-Daniel fue llevado a la morgue y yo llame a su madre para contarle todo lo que había pasado con su hijo, no será fácil decirle, pero lo haré.

- Hola buenas noches, dije con tristeza.

-Hola buenas noches, hija ¿encontraste a mi hijo?

-Solté en lagrimas y le dije que tenía que venir al hospital, ya que lo que le tenía que decir no podía ser por teléfono.

-Al transcurrir de los minutos, llega su madre preocupada, ya que no sabía lo que pasaba, le dije que se sentará y que tratara de calmarse.

-Lo que le voy a decir, no es fácil para mi, ni para usted, necesito que se calme, tome mis manos y sea fuerte, cuando usted me llamo, para avisarme de que su hijo estaba desaparecido, yo tome el atrevimiento de ir a buscarlo a los bulevares que el siempre trataba, según lo que el me dijo, resulta que en los bulevares no había rastro de su hijo y el único sitio que me faltaba por buscar era en el parque, que yo frecuentaba con el, ay veo a un hombre no lo pude describir ya que no veía muy bien por la neblina, me acerque y resulta que era su hijo Daniel amarrado con un impacto de bala en su cuerpo y con una nota que decía recibiste mi regalo, la carta que le hicieron a Daniel, iba dirigida hacia mi y creo tener la sospecha de quien pudo haberlo hecho.

-¿Qué? pero por que se desquitan con mi hijo, dijo con voz molesta y desconsuelo.

-Señora necesito que se calme y que sea fuerte....

-No, no me quedaré tranquilo, mi hijo está muerto y su asesino sigue en las calles.

-Lo sé, pero yo no puedo decir quien es, por que empeorara las cosas para mi y tal vez para usted también, ay un secreto que le revele a Daniel y a mi hermana que en paz descanse, gracias a ese secreto es que Daniel y mi hermana están muertos.

-Lo siento, por esto que te voy a decir, pero está muy mal que te quedes callada y que por un secreto que no sé cual es, paguen personas inocentes, tanta desgracia tienes en tú ser, que no te deja ser feliz y los demás tienen que pagar por tú culpa. dijo con voz sarcástica y molesta.

-Señora no necesita ser tan fuerte conmigo, yo no mate a su hijo, para que sea tan dura conmigo, si por mi culpa lo mataron, pero no puedo hacer nada, por que los seres que amo, pagaran por mi, el lo que quiere es verme sufrir y dejarme sola y tal vez también atente contra usted, ya que cuando lo fui a buscar, para arreglar nuestras cuentas, me dijo que me están vigilando día, tarde y noche, ahora ve por que le digo que tiene que calmarse y quedarse callada. dije con voz alta y molesta.

-Tengo que irme, tengo un hijo que arreglar.

-Tome mi auto y me fui a mi casa, a ver como estaba mi mamá con tanta desgracia rodeándonos, mientras iba a casa, estaba pensando en todo lo que había pasado, tal vez si me mato, podría ser feliz en un lugar mejor, sin preocupaciones sin nada.

- Me detuve en un puente y me aguante de los agarraderos y dije, ¿cómo seria el mundo sin mi? ¿seria mejor? si me tirará de aquí todo se acabaría, dejaría de ser un estorbo para los demás, cuando decido tirarme del puente, siento que alguien me aguanta la mano y me dice no lo hagas, aunque tú no lo creas vales mucho para el mundo, me di la vuelta y era un muchacho de ojos claros, cabello negro, de piel blanca.

-Suéltame y vete, no pagues por una tragedia como está

-No lo haré, ven vamos hablar, certifica tú error, todo se puede arreglar, todo tiene solución, no te apresures a la circunstancia, morir no es la solución a todos tus problemas, lo que haras es causar más sufrimiento, no sé que te pasa, pero quiero saber.

-Está bien, espero que lo que pidas sea razonable.

-Hola soy Monica Fuentes.

-Hola soy Alejandro Padrón ¿cómo una mujer tan bella como tú se pensó tirar de esté puente?

-Retractate mujer bella, no, mujer llena de desgracias y misterios si.

-Vaya, por el tono sarcástico, en como me lo dices, se nota creíble, sentémonos en la acera a charlar.

-Le dije que está bien, necesito pasar el miedo que tengo, acabo de pasar una etapa de desesperación, lo siento.

-Tranquila, todos tenemos problemas, pero la solución no es suicidarse, eso empeora las cosas, aunque tú no lo creas, dijo con voz dulce y con una sonrisa.

-Vaya eres una persona muy linda y esa voz tan dulce que tienes me recuerda a una persona, que ya no está y que no lo estará más.

-Se que nos acabamos de conocer, para meterme en tú vida, pero que te paso para que tomarás está decisión, mírate de tanto llorar se te corrió el maquillaje.... tomo mi cabello, lo hizo a un lado y me quito el maquillaje.

-Gracias, dije con una sonrisa, solo te contaré una parte, no quiero que mueras por mi culpa.

-Vaya morir, oye ¿estás bien?

-No estoy loca, si piensas eso, es una larga historia, que nunca terminaré de contártela.

-Encontré a mi novio muerto en un parque, amarrado en un árbol, con impacto de bala en su cuerpo y con una nota en su boca, que iba dirigida a mi, decía: Recibiste mi regalo.

-Vaya, estoy impactado, dijo con reacción de susto.

-Se que es difícil de creer, pero detrás de todo esto ay una historia, un misterio, un secreto que no puedo revelar, si lo hago, puede morir la persona que lo sepa. Creo que es tarde, me tengo que ir, gracias por ayudarme, hablar contigo me hizo reflexionar y me fue de gran ayuda y relajamiento.

-Oye antes de que te vayas quiero que tomes mi número telefónico, claro para que no perdamos la comunicación, creo que te salve la vida y lo menos que harías es olvidarme.

-Claro no lo haré, ten esté es mi número de teléfono, llámame cuando quieras.

-Por supuesto que si, espera mi llamada, la tendrás muy pronto, espero que un día de estos podamos salir, para conocernos mejor.

-Suena razonable, pero puede ser, algún día, tal vez pueda ser pronto.

-Eso es un ¿si?

-Puede ser. Dije con tono sarcástico y con una sonrisa

-Es hora de irme.

-Adiós.

-Adiós.

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⏰ Última actualización: Mar 11, 2017 ⏰

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