Sueños de cristal

Primer sueño

Creo que ya me he presentado, pero aún así lo haré de nuevo. Me llamo Shara y tengo diez años. Mi mayor secreto es mi amiga Dalia. Estoy creando para ella un novio, pero es muy difícil. Le gustan los hombres fuertes, de carácter amable y que la cuiden, pero creo que no quiere que lo haga.

El chico que estoy pensando para ella se llama Mikjail, tiene el pelo negro azabache, muy largo, atado en la nuca. Además, como ella, es un príncipe de un reino muy lejano. Ella cree que no lo se, pero a veces olvida que soy yo quien la ha llamado.

Se presentó en mi casa hace unos meses. Mamá le abrió la puerta y se quedó muy sorprendida al ver sus largas orejas. Dalia es una elfa con las orejas llenas de pendientes de oro y rubíes y con una corona de zafiros muy fina. Yo le había hablado de ella a mi mamá y la reconoció nada más verla. Ella me prometió que podía quedarse con nosotros. Nunca la he visto comer nada, lo único que hace es ayudar en todo lo que puede. Ayudó a papá a hacer la caseta de Lupi, nuestro perro, y a mami a cocinar. Tiene mucho talento para todo.

¿Sabéis que? Mikjail casi está terminado, mañana soñaré con el todo el día y acabará por aparecer, estoy segura. Dalia no tiene por qué saber quien es, pero mamá ya lo sabe. Dice que está deseando que aparezca porque le da pena verla tan sola. Además sabe que ha perdido algo, aunque nunca le dije qué. Dalia perdió su reino, todos murieron. Me da pena haber soñado eso, pero no pude evitarlo.

Mamá piensa que soy buena, aunque tenga demasiada imaginación. Ahora Dalia está ayudando a papá a arreglar el tejado. Ayer lo rompí sin querer cuando soñé que un hipogrifo aterrizaba en el tejado. Yo subí a verlo y me llevo a Neverland, donde conocí a Peter Pan. Él es muy guapo, inocente y dulce. A Dalia le gustaría, pero pronto tendrá a su príncipe y nos iremos los tres a Neverland. Quiero llevar a mis papás, pero no pueden seguirme a donde voy, después de todo soy un hada, pero eso es algo que ellos no saben. Se lo explicaré todo en una carta y Dalia, Mikjail y yo nos marcharemos a donde siempre seremos felices. Ups, mi mami. Será mejor que oculte mis alas.

...

Lo siento, mami no puede saber quien soy, se pondría muy triste, pero por suerte puedo hacerme pasar por humana. Lo llevo haciendo diez años. Ellos no saben que sé que soy adoptada. Cuando supe lo tristes que estaban por no poder tener hijos me hice pasar por bebé para que ellos me adoptasen, pero en realidad soy el hada reina de los sueños. Tengo que confesar una pequeña mentira. Mi verdadero nombre es Lilith. Siento no habérselo dicho antes, pero olvidé quien era por un momento. Pronto será hora de volver. He escrito la carta para mis papis, la dejaré sobre la mesa de mi cuarto cuando me vaya
Eso será dentro de muy poco. Acabo de terminar a Mikjail y no tardará en aparecer.