For the keeping

Capitulo 2 - Fiesta.

Capítulo 2

Fiesta

SOPHIE

La música resonaba por cada esquina de esta inmensa casa.  

Joder, todo esto debió haber costado una fortuna.

Caminé por la sala de estar llena de muchachos borrachos y chicas que parecían mono tratando de subirse a alguien que probablemente no recordarán en la mañana. Los sillones estaban todos ocupados y había algunos preservativos tirados en el suelo.

Fuera del paquete. 

Arrugué la nariz en señal de asco

Iugh

Apenas podía moverme para poder llegar al estúpido patio e intenté recordarme nuevamente por qué mierda estaba en esta basura a la cual le llaman fiesta.

Ah sí, soy a chica nueva.

Genial.   

Me había auto obligado a venir con la esperanza de conocer a alguien, quizás un novio y seguir adelante con mi vida. Pero eso significaba dejar mi pasado atrás y aún no sabía si podría lograrlo 

Bien, quizás no un nuevo amigo pero sí un novio.

Nueva ciudad

Nueva vida

Nuevo novio

Mi primer novio.

Observé minuciosamente cada lugar de la casa –o al menos lo que alcanzaba a ver- y no había nadie que llamara mi atención. Todos borrachos, vomitando o tratando de levantarse a alguna chica para tener un polvo de una noche. Mi vista se dirigió a la cocina, el único lugar que no estaba atestado de adolescentes y humo.  

Abrí el pequeño refrigerador lleno de cervezas y bebidas. La mesa estaba llena de botellas de vodka, ron y otros que no conocía. Vasos con Margarita  y Mojito servidos, y otros con algún contenido extraño que preferí no tocar.  Me decidí por un vaso de vodka con jugo de naranja y me di la vuelta para volver a la horrible sala de estar. Quizás hasta podría salir al balcón o el patio si me lo proponía.

Pero maldita sea si no estaba fría la cosa que sentí en mis pechos y estómago.

-¡Pero que mierda!- Chillé al notar que un frío líquido me había empapado la blusa entera trasluciendo mis sostenes negros-¿Estás de imbécil?

Genial, ahora soy algo así como una puta.

Lo que parecía cerveza u olía como cerveza había caído sobre mis jeans azules ajustados justo por debajo de la barriga Y le habían caído pequeñas gotas en mi Converse nuevas.

Así que… ahora era una puta con problemas de ir al baño y zapatillas malolientes. 

-Hum… yo… lo siento tanto- Dijo una voz femenina, bastante dulce a mi parecer.

Levanté la vista para encontrarme con unos hermosos ojos pardos mirándome desde arriba con preocupación. La chica debía medir un metro setenta y  tenía un liso pelo rubio con un color morado en las puntas junto una argolla en la nariz. Mi mirada se suavizó al ver que lucía algo pequeña con ese miedo e inquietud brillando en sus lindos ojos.

Oigan, esperen un momento, yo conozco a esta chica.

-¡Hey, Dakota! ¿Quieres otra cerve…?Wow- Un chico de cabello oscuro y liso –Bastante guapo en realidad- sostenía una cerveza en cada una de sus manos y pestañeaba incrédulo a cada una de nosotras. Miraba a Dakota y luego a mí. Dakota y luego yo. Dakota. Yo. Dakota. Yo – Vaya…