No digas te amo.

Quizás no tenga el tiempo suficiente para contarles sobre todos, sobre la chica del gorro rosado, sobre el chico de mis sueño, sobre la chica que está sentada en aquella banca en un día de invierno, sobre el chico de una gran sonrisa que está en la siguiente esquina, pero soy conciente que quizás en unos días o mucho más tiempo pueda contarles que pasó con ellos, por ahora les dejaré la intriga de que pasa en tiempo real , pero, creo que una buena forma de compensarlos sería contarles la historía de un principio... el momento exacto en que todo comenzo, en el que su sonrisa sin pensarlo me atrapó o quizás un poco antes cuando yo estaba sola y no sabía que hacer , quizás ese puede que sea el comienzo perfecto para explicarles todo, exactamente todo con lujo de detalle.

Era un día como todos los otros, allí estaba yo después de un largo día de escuela sentada en una banca la cual estaba ubicada a un costado de la entrada principal. Como todos los días nada lograba llamar mi atención , lo monotono ya era algo que siempre estaba de mi lado y solo no se me daba la gana cambiar de parecer,no soy de buscar muchos cambios en mi vida , no me gusta arriesgarme por las cosas que quiero prefiero estar segura en un lado donde no logre llamar la atención para no causar problemas. Tampoco soy de muchos amigos , la mayoría está ocupado con cosas de amor y cursilerías , lo que es yo, prefiero alejarme de eso, eh visto a muchos enamorarse y salir lastimados , no se me apetece terminar como todos llorando por un amor que lastima , prefiero estar sola y no convivir con cursilerías en mi día a día.

Sí, soy un completo robot sin sentimientos que jamás buscará la felicidad en alguien más si no es si mismo , podrían llamar ego u orgullo, yo pienso que no es nada de eso sinó amor personal que desde que mi padre se alejó de nuestro lado mi mamá logró enseñarme que es mejor estár solo que con alguien que arruine tus días. El día seguía normal nada alteraba el orden de las cosas como jamás nunca se habia alterado ya que siempre eh estado en la misma escuela todo ya era de esperarse, pero tengo un leve presentimiento que altera un poco mi pecho.. creo que debería ver al doctor y así me receta algo.

Era hora de dirigirme a mi casa la cual estaba un poco lejos pero con buena música se lograba hacer más corto el recorrido, ya que era de costumbre que caminara sola a casa, hasta que algo de imprevisto sucedió, de rrepente todo se nubló y caí al piso. Al despertar estaba realmente asustada no estaba bien en mis sentidos y solo logré divisar una cara... -no puede ser, me raptaron!-... pero, si me raptarón  ¿porqué aquel chico de por allá está mirandome con cara amable?...

Volví en mi y me dí cuenta que aún seguía tirada en el piso y no estaba en la calle sinó en la entrada de la escuela...- espera un momento, HACE CUANTO ESTOY AQUÍ!!!??- el chico con cabello risado y una gran sonrisa me respondío ... - no hace mucho, te encontré tirada en el suelo y vine a ver que pasaba, déjame presentarme , mi nombre es "yuto" quizás no lo conozcas ya que mi madre es una aficionada por los nombres con significado, pero te explicaré, significa "chico amable", estupido verdad ?- me miraba y seguía con una gran sonrisa en su rostro...

Le pregunté que hacia por estos lados mientras sobaba mi cabeza ya que tuve un gran golpe al caerme y el me respondió que era nuevo , acababa de matricularse para el mismo curso en que yo estaba y que empezaba sus clases pronto. No lo sé, el recuerdo de su sonrisa se mantuvo por mucho tiempo en mi cabeza pero intenté no darle mucha importancia quizás por el hecho de que eso para mi no era algo relevante y jamás se me pasaría por la mente que aquel chico de cabello rizado y una gran sonrisa sería algo fundamental en mi vida.

Al día siguiente llegué como siempre y sí, aquel chico estaba sentado al final de el salón justo al lado de mi puesto que se ubicaba cerca de la ventana. Jamás pensé que se podría venir después de eso.