No

124 31 5
                                    

Mientras besaba tus labios introduje mi primer dedo en tu interior, dejando que te acostumbraras.

Mis movimientos fueron lentos hasta que tus paredes dejaran de apretar tanto, luego un segundo dedo me dejó hacer mejore el trabajo de dilatarte.

El tercero te dolió más que los anteriores, pero resististe bien. Seguí así hasta que pediste más, hasta que tus caderas se movían con necesidad.

Los saqué y tome mi miembro, lo roce un par de veces con tu entrada.

Logré que suplicaras mi atención.

Introduje el glande muy despacio. Tanto que no sabía quién sufría más, si tu o yo.

Tus manos se aferraron a las sábanas. Cerraste tus ojos muy fuerte al igual que mordías tu labio inferior. Unas cuantas lágrimas rodaron por tu mejilla.

-¿Pa-paro? – hable casi sin aliento por lo excitado que estaba.

-¡No!

Tu negación me permitió acelerar mi ingreso tortuoso.

Por encima de ti 《VHOPE》 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora