El lunes, Iker espera a que Ana Fátima se suba a su autobús antes de caminar hacia su colegio. Al llegar, su grupo de amigos lo saludan alegre "hasta que al fin nos honras con tu presencia" se ríe Kike, un chico alto de pelo colocho negro, "¿me he perdido de algo bueno?" pregunta Iker saludando a todos sus amigos con el puño "la profesora de lite la han despedido" exclama Sebastián, un muchacho bajo de pelo castaño que usa unas grandes gafas de marco rojo. Empiezan a bromear sobre los rumores de las razones por la que la despidieron. Pronto la charla cambia de tema y bromean de otros asuntos menos importantes hasta que el timbre suena. Todos empiezan a dirigirse a sus clases "¿Quién es ahora el maestro de lite?" le pregunta Iker a Kike "un profesor llamado Enrique Sevilla" le susurra Kike. Iker frunce el ceño "¿y cómo es?" pregunta "estricto" dice él.
Enrique Sevilla es un hombre alto, el pelo negro con corte militar ya se está tornando blanco, su piel es morena y tiene unos ojos color azul brillante. Al verlo, Iker piensa que él encaja en el estereotipo de maestro de educación física. Enrique imparte su clase con indiferencia, hasta que cuando les asigna el trabajo es que nota a Iker "no nos hemos presentado muchacho" le dice Enrique "soy Iker Eduardo Echeverría, estaba enfermo" dice rápido Iker para que Enrique deje de hacerle preguntas. Enrique le sonríe "un gusto Iker, que bueno que estés mejor" le dice antes de alejarse del escritorio de Iker. Iker entrecierra los ojos, jamás había conocido a alguien tan amable que no quisiera algo o no vendiera algo.
Al terminar las clases, la psicóloga del colegio lo llama. Iker Eduardo le hace una mueca a Kike, haciendo que esté se ría. Iker entra a la espantosa oficina del a psicóloga de mala gana. La oficina de la psicóloga demuestra las enfermedades mentales que ella posee; aunque la gente suele llamar esto una obsesión por los perros. El Come-Sueños ha estado tantas veces (más de las que le gustaría admitir) en la condenada oficina que le ha dado la oportunidad de contar los perros que hay decorando la oficina; 47 perros dorados, 34 perros oscuros, 67 perros blancos y 56 manchados.
La psicóloga le pide que se siente en la silla que tiene forma de pata de perro, Iker no quiere pero no tiene opción por lo que se sienta. La psicóloga es una mujer baja, de pelo oscuro, piel clara y ojos castaños muy pequeños. Tiene una sonrisa forzada que muestra una dentadura blanca algo torcida. La psicóloga se acomoda en su silla "los profesores dicen que volviste a contestarles" le dice ella "los rumores corren rápido" murmura Iker viendo aun todos los perros, ella se inclina hacia él "Iker Eduardo ¿Cuántas veces hemos hablado de esto?" le pregunta "al parecer no las suficientes porque sigo aquí" piensa Iker rodando los ojos "mire, tengo que llegar temprano a mi casa" dice él en vez de lo que realmente quiere escupirle a la psicóloga "¿por qué?" quiere saber la psicóloga. Iker suspira "mi mamá está afuera de la ciudad y tengo que cuidar a mi hermana" miente rápido Iker con una calma que hace sonar que es real "¿están tú y tu hermana solos?" pregunta entonces la psicóloga. Iker se levanta "con su permiso" dice antes de salir corriendo de ahí a pesar de que la psicóloga intenta detenerlo.
El profesor Enrique se choca con Iker "lo siento chico" dice él pero Iker sigue corriendo sin fijarse mucho en él "ese muchacho..." piensa Enrique pero se sorprende al ver a la psicóloga detrás de él "¡Iker Eduardo!" grita ella pero se detiene exhausta mientras el muchacho sigue corriendo. El profesor, aun con la sorpresa en su rostro, se acerca a la psicóloga "¿Qué pasa? ¿Por qué lo sigue?" pregunta él curioso "se escapó mientras hablábamos, no se preocupe, siempre pasa" murmura ella sin aliento "¿Por qué fue a hablar con usted?" pregunta el profesor "los maestros se quejan del comportamiento de Iker" dice únicamente la psicóloga antes de regresar a su oficina, Enrique mira al chico irse.
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Sueños Frustrados
Teen FictionUn grupo de amigos, que conforme van pasando los años, vivirán las experiencias y aprenderán, ya sea por las buenas o por las malas, lo que la vida tiene preparados para ellos mientras intentan mantener su fe y esperanza de que todos los sueños se p...