Extra 1

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-El verano después de la secundaria no los separó, al contrario, los unió aún más.
Esta es la historia de cómo Isaac y Ceci, terminaron juntos.-

Era final de verano, los chicos habían decidido hacer un viaje a la playa. Tenían 16 años y cómo era de esperarse sus padres no los dejaron. 10 amigos tenían planeado el viaje, ya estaba todo listo. Si, fue una mala idea preparar todo antes de pedir permiso, pero bueno, a los 16 sólo quieres divertirte y no piensas en otra cosa.

Habían decidido escaparse ese fin de semana a la playa, implicaba un gran riesgo y castigo seguro para todos, pero tampoco es que fueran tan lejos. En realidad la playa quedaba a tres horas de la ciudad y sólo estarían un día allá.

El viernes por la mañana todos hicieron sus maletas y sigilosamente las sacaron de su casa, uno de ellos, Luis, tenía una vieja Combi Volkswagen color menta, en la que se irían todos juntos ya que no había forma de rastrear esta camioneta. Todos llevaron su equipaje para subirlo, la comida y bebidas las comprarían en el camino a Puerto Vallarta.

A las 3 am pasarían por cada uno de los chicos y se escaparían a celebrar su último verano juntos. Y así fue.

Todos habían dejado una nota a sus padres diciendo que estaban bien y que regresarían el domingo, no es que se fueran a ir por siempre.

En el camino, hicieron varias paradas, para comprar comida, ir al baño y dormir un rato. A las 6 am estaban en Sayulita, un pequeño pueblo surfista muy tranquilo en el que pararon para dormir un buen rato para después salir a turistear.

Como a las 10 de la mañana despertaron, se cambiaron por ropa más fresca y salieron a desayunar, tomarse algunas fotos, comprar recuerdos y surfearon un rato.

A las 2 de la tarde estaban ya en Puerto Vallarta. El centro, sus calles, sus playas y su ambiente es el mejor para pasar un rato increíble, los chicos lo aprovecharon para dar una vuelta por todo el centro, tomarse más fotos y comprar más recuerdos.
Nadaron un rato y jugaron en el agua guardando cada recuerdo en su memoria.

Cuando el sol se metió decidieron estacionar en la playa y hacer una fogata. Todos eran amigos muy cercanos y aunque les gustaba mucho la fiesta e ir a los antros, decidieron quedarse juntos, pasar este último fin de semana y verano más tranquilos.

Pusieron música playera, la noche era tranquila y no se escuchaba mucho ruido a pesar de estar cerca de la zona de antros y bares.
Cada uno usaba una pulsera de neón, de esas que brillan en la oscuridad y estaban sentados en mantas junto a la fogata, formando un círculo.
Empezaron a contar anécdotas graciosas, tristes, de miedo y a recordar viejos tiempos. Cenaron y bebieron un poco de Vodka y Whiskey, sólo para ambientarse un poco más.

Ya más noche, cuando la Luna salió & algunos ya estaban dormidos, uno que otro algo borracho y otros más en su momento de romance, Isaac se llevó a Ceci a caminar por la playa.

No se escuchaba nada más que las olas al chocar con la costa y entonces Isaac rompió el silencio.

-Ceci, llevamos estos últimos 3 meses conociéndonos y saliendo, la verdad cada día me encantas más. Eres la niña más dulce, inteligente y divertida de todas, adoro pasar el tiempo contigo y créeme que cada vez que te veo me dan ganas de besarte y abrazarte por horas.

-Isaac, yo igual siento que cada día que pasa me vas enamorando más. No hay palabras para describir lo que siento por ti. Eres el chavo más loco, divertido y dulce que conozco, has sabido como ganarte mi corazón.

Los dos pararon frente a un hotel donde de fondo sonaba "Sugar" de Maroon 5 y una boda se celebraba.

-Me vuelves loco, lo único que quiero decirte es, ¿Quieres ser mi novia mi Ceci?

-Claro, que quiero serlo. Pensé que jamás me lo preguntarías.

La miró a los ojos y la besó, la besó de una forma que no había hecho antes, dulce pero traviesamente.

-Creo que es hora de regresar.

-Lo mismo digo Isaac.- le respondió la chica, pero antes de irse lo besó mordiéndolo un poco.

***

Ya de regreso con los chicos, les dieron la noticia. Todos se alegraron y bromearon diciendo que ya era hora, después de siglos.

A la media noche, cada amigo encendió un globo de Cantoya, los lanzaron al cielo y se elevaron lejos. Todos se tomaron las manos y se abrazaron.

Sin duda, se iban a extrañar demasiado y aún más porque seguramente no se verían en meses debido al castigo de los padres.

Cuando ya todos estaban dormidos, Isaac y ceci seguían aún abrazados junto a la fogata.

-¿Cuánto quieres a tu muy guapo novio Ceci?- preguntó el chico.

-Mucho, mucho, mucho.- dijo esta riendo.

-Yo también quiero a la mía mucho, mucho, mucho pero mucho.- y dicho esto la besó.

-Espero les haya gustado este extra. Para las que se lo pregunten, así es como Isaac y Ceci comenzaron a andar. El capítulo de la graduación, sólo habla de cómo él le pidió salir, más no ser su novia. Los quiero mucho, nos leemos pronto.-

Hey CeciDonde viven las historias. Descúbrelo ahora