Todo el mundo piensa y se hace la misma pregunta. ¿Qué hay más allá de la muerte? Millones de personas, millones de respuestas y seguramente alguien acierte, pero nadie lo sabrá hasta que no le llegue la hora.
En casi todas las religiones vas al cielo o al infierno, ya sea llamado de otra manera, luego podremos encontrar gente que cree que nos reencarnamos, tanto en animales como en personas, es más hay personas que busca exactamente la hora en que murió su familiar o amigo y va a buscarlo por el mundo. Otro tipo de creencia es también los que piensan que tu espíritu vaga por el mundo hasta cumplir su misión y si no la cumples te quedas atrapado en ese limbo hasta convertirte en esencia malvada, de ahí nacería la teoría de los espíritus malignos y el uso y creación de oujias. Además hay una fe que si lo miras bien tiene mucho sentido, no sé si la habréis escuchado pero de lo que trata es que cuando una persona muere ve el famoso pasillo de luz, pero que tal si mediante caminas hacia el fulgor todos tus recuerdos, tus experiencias, todo lo que has vivido se te va olvidando y cuando llegas a esa luz no recordaras nada de nada, y por eso al abrir los ojos resulta ser la iluminación de un hospital donde estas volviendo a nacer y ese sea el motivo por lo que los bebes al nacer lloran. En este punto ¿cómo saber en qué creer?, además hay también varios factores ¿existe el alma? o ¿somos solo materia?
Yo en mi caso no se en que creer, sé por experiencia propia que hay gente que cree que hay un cielo y que esa persona que se encuentra ahí arriba, cuidándote como un ángel guardián, que cuando fallezcas podrás reunirte con él. Yo no conocí a mi abuelo y me duele porque murió tres años antes de que yo naciera, tres años más y hubiera conocido a su primera nieta. No me duele tanto como a mi padre, mis dos tíos o mí abuela, pero me cuentan tantas cosas suyas ya sean tanto buenas como malas o las mejores las graciosas, que daría todo lo que fuera para poder hablar con él, aunque fuera solo una vez. Mi otro abuelo también murió cuando tenía 11 años, no teníamos mucha comunicación pero era mi abuelo y siempre lo querré. En cuanto enfermo mis padres se tuvieron que marchar hacía allí, yo por otro lado no puede por el hecho de tener que ejercer de hermana mayor, además de que no era bueno que una niña fuera a ver a su abuelo en esas condiciones, aun así, no me pude despedir y me arrepiento bastante.
Ahora me doy cuenta de lo que produce él no decir un adiós o un te quiero a las personas que adoramos, es simplemente impresionante. No digo que todos los días le digáis a vuestros familiares que los queréis yo soy la primera que le cuesta horrores decirlo pero de vez en cuando sí deberíamos de hacerlo.
Seguramente que alguna vez os han preguntado ¿temas a la muerte? Hay gente que le tiene mucho pavor otros en cambio no. Yo en mi caso sí y no, todo el mundo lo queramos o no, tenemos miedo a morir, el no ver a tus padres besarse o dejándote en ridículo, la comida de tu abuela, los regalos de los tíos, las risas y las lloriquearas de una borracheras con tus amigos y millones de cosas más que tendrías que dejar atrás. No solo eso sino el dolor que puedes causarle a tantas personas. No se vosotros pero a mi me mata ver a la gente que amo sufrir por mí. Y no le temo ¿por qué? porque si pensara que en cualquier momento puedo morir yo o alguien que quiero viviría en atormento continuo que no tendría salida, no sería feliz.
Por eso hay que disfrutar de la vida, reír, llorar, gritar, sentir ...La vida puede ser un día o muchos, pero hay que saber vivir, aunque estés triste, tu vida vale mucho y piensa en la gente que te rodea ¿te gustaría verlos así? ¿Pensando en que les da igual morir? No verdad, pues para que pensarlo, todos tenemos esos amigos idiotas que están cuando más los necesitas. Yo soy pesimista y tengo que admitir que a veces he pensado en que si muero daba igual lo que me pasara, total no sería nada pero eso a mí, ¿Mis padres? ¿Mis amigos? Los dejaría doloridos, peor destruidos o por lo menos eso quiero creer.
La etapa de la adolescencia es conocida porque hacemos toda una montaña de un grano de arena, si tenemos unos problemas nos querremos morir y creemos que todo está en nuestra contra. Por merlín, Dios, buda o lo que sea tengo 17 años no he vivido ni una cuarta parte de mi vida, y pensando así desaprovecho mis años de juventud.
Así que es hora de sonreír, salir de fiesta, llevarle la contraria a mis padres, estudiar y vaguear, soñar, viajar, ir a la universidad, enamorarme, gozar... y sobretodo VIVIR MI VIDA A MI MANERA, que cuando ya esté viejecita con arrugas, el pelo gris, haya visto a mis hijos y mis nietos crecer. Hay es cuando ya habré vivido y disfrutado como yo he querido, por lo que recibiré a la muerte como una amiga, y justo en ese momento, hay es cuando me daré cuanta de todas y cada una de mis grandes aventuras rodeada de mis queridos, me iré si pero estaré feliz por a ver VIVIDO.
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Más allá de la muerte
Short Story¿Qué es morir? ¿Hay algo después? ¿hay que temerla? ¿espiritual o materia?