-Pero papa, yo no quiero ir a ese campamento mestizo. Quiero quedarme aquí en el Olimpo.
-Tienes que ir hija, los semidioses tienen que aprender a defenderse.
-Pero papa, ese es el problema, yo no soy una semidiosa, soy una diosa, hija de Hefesto y Afrodita.
-Pero igualmente tienes aue aprender a manejarte en el campo de batalla.
-¿Sabes que? Me voy, aquí no consigo nada.
-Que te lleve Maximus, se sabe el camino sin mounstruos.
Me fui a mi habitación en el palacio del Olimpo y recogí todas mis pertenencias.
-¿Te iras asi?-me dijo mama.
-Si mama, ¿hay algun problema con este vestido?
-Nada, estoy orgullosa de ti hija, eres bella y lista, tienes un gran don que no todos tienen. Toma un regalo de mi parte y puedes venir a visitarnos cuando quieras.Mi mama me dejó una caja pequeña encima de el tocador y se fue de la habitación.
Abrí la caja y me gustó lo que habia dentro y lo guardé junto con mi ropa.
El collar me lo puse. Salí con todas mis bolsas amarradas a mi espalda con buenos nudos gracias a tio Poseidon y llamé a Maximus.-Gracias tio Hades por prestarmelo.
-De nada pequeña.Me agarré bien a la crin del caballo y empezó a galopar por los aires.
Pasados unos 20 minutos, Maximus me dejó en una playa y allí había un chico.
Maximus volvió al Olimpo volando y yo me acerqué a el chico.
-Hola, ¿te gusta el agua, no?
El chico me miró asombrado.
-Si, mi padre es...
-Tio Poseidon, si, tu debes de ser Perseo ¿no?
-Prefiero que me llamen Percy.
-Bueno Percy, ¿me podrias llevar con Tio Dionisio y Quiron? Mi padre y mi madre me han mandado desde el Olimpo para que venga a entrenar.
-¿Quienes son tus padres?-me dijo confundido.
-Hefesto y Afrodita, una mezcla rara, lo se.
-Eres... Una... Diosa...-dijo con temor.
-No me tengas miedo por eso, solo he visto el Olimpo y quiero conocer mundo.Fuimos atravesando todo el campamento y la gente me miraba rara por mi ropa.
Cuando llegamos a la Casa Grande, Percy llamó y le abrió un hombre con una camisa Hawaiana y bermudas, detrás de el había un centauro.
-¿Que pasa Perseo?-dijo D.
-Es Percy y he encontrado a esta chica en la playa. Dice que es hija de Hefesto y Afrodita.
D. me miró bien y gritó.
-Mi pequeña Cleo...
-En realidad es Calíope.
Entonces, el centauro se adelantó y hizo una reverencia.
-Es un honor tener a una diosa, puede contar con lo que sea por nuestra parte.
Ese hombre/caballo se ganó mi respeto.
-Por favor, gracias por acogerme a ustedes en su campamento y llamame solo Calíope.
-Como quiera, Percy-se giró hacia el-lleva a la señorita a la cabaña que prefiera, la que esta menos ocupada es la de Hefesto, solo estan Leo, Charles, Jake y Shane.Mientras ibamos a mi cabaña Percy me decia como eran mis nuevos compañeros.
-Leo es muy bueno con las herramientas y es muy amable, pero aveces tiene mucho ego.
Charles no sabe casi que de herramientas pero si tiene información, puede hacer muchos inventos.
Jake es muy vanidoso, siempre esta con alguna de las hijas de Afrodita o Apolo.
Muy bueno con la espada.
Shane no es muy bueno con las herramientas ni con la espada, pero tiene un don de sabiduria que parece de la cabaña de Atenea y es muy bueno en combate cuerpo a cuerpo.
¿Y tu?
-Bueno, tengo el don del fuego, soy buena fabricando armas y combate,... En el Olimpo solia luchar con espadas o aveces, como mis tios son muy débiles, los seducia como me enseñó mama.
-Eso deberia de ser muy gracioso-dijo Percy.
-La verdad es que si, imaginate a Ares luchando conmigo y en dos minutos intentando llevarme a su cama.Cuando llegamos me abrió la puerta y parecia el taller de mi papa pero un poco más decente y con camas.
-Leo, Charles, Jacke, Shane. Ella es vuestra nueva hermana, Calíope.
-¡Otra semidiosa!-dijo Leo.
-Más bien diosa, hija de Hefesto y Afrodita.
Todos miraban asombrados.
-No es muy normal ver dioses por aqui ¿no?
-La verdad, no-dijo Shane.
-Pues ya teneis a una, vamonos a comer, tengo muchisima hambre.
Deje mis bolsas en una cama desocupada y comencé a guardar ropa en un armario.
-Espero que no vayas así al Comedor-dijo Charles.
-¿Porque?
-Porque es muy provocador y poco particular por aqui.
-Soy hija de Afrodita¿Que esperaban, que me pusiera abrigos hasta los pies?Despues de discutir un buen rato, me rendí y acepté que Leo me dejara ropa "normal" y mañana ya saldría con algunas chicas a comprar ropa en la ciudad, suponiendo que hiciera amigas.
Cuando me acabé de vestir, salí a la habitación(estaba en el baño) y solo estaba Leo.
-Los otros ya se han ido.
Me acerqué a mi cama para coger una goma para el pelo y poder hacerme una cola de caballo, pero Leo me cogió por detrás de la cintura y me susurró al oido.
-Me pone que utilizes mi ropa.
Me separé sobresaltada de el y salí corriendo al comedor a pesar de sus gritos llamandome.To be continued...