Capítulo 34

4.5K 221 47
                                    

POV Camila

Mi encuentro en el aeropuerto con Lauren no fue como lo esperaba, ella simplemente me ignoro y subió a su avión. Hubiera preferido un par de insultos acompañados por un par de bofetadas, si eso se ha escuchado muy masoquista pero es cierto, prefiero eso a su indiferencia.
Las fiestas había sido una completa tortura a excepción de poder disfrutar un poco más de mi familia.

A los pocos días del comienzo del nuevo año se reanudaron las clases, no hubo rastro alguno de Lauren en la escuela, llegue a pensar que si se ha cambiado de institución pues me había topado con sus hermanos en el estacionamiento además, la casa de los Jauregui si tiene movimiento. Pero, para mi sorpresa el ultimo día de la semana apareció en los pasillos con dirección a su casillero, se veía como siempre aunque obviamente no me dirigió la palabra para nada.
El odio hacia mi estaba claro, simplemente no podía con eso. Ella era mi todo y, lo arruine, como todo en mi vida. Pero, lo peor fue al momento de salir, se estaba besando con una desconocida en el estacionamiento. ¿Tan rápido se olvido de mi?

El fin de semana había llegado, mis padres habían decidido ir a visitar al resto de la familia por el cumpleaños del abuelo que vivían en el condado vecino pero, yo debía quedarme a estudiar para aplicar el examen de la universidad, al final terminé decantando por artes escénicas en la Universidad de Florida.

Tome una ducha para relajar mi cuerpo un poco y, como estaría sola únicamente vestía unas bragas y el albornoz. La idea era estudiar para después ir a la fiesta que iban a dar el equipo de fútbol, por la victoria del torneo de invierno, finalmente decidí no ir pues, Lauren estaría ahí.
Me dediqué nuevamente al estudio pero, el timbre sonó y por lo tanto debía bajar a abrir aunque no quisiera.
Baje las escaleras, quien se encontrará detrás de la puerta era muy impaciente pues no dejaba de tocar. Al abrir me lleva una gran sorpresa, no esperaba que ella estuviera delante de mí, después de todo lo ocurrido entre las dos.

—¿Que haces aquí, Lauren? — pregunté muy sorprendida

—No debiste de engañarme — hablo con una voz rasposa que recorrió todo mi cuerpo en escalofrío

Intenté cerrar la puerta pero ella me lo impidió con su cuerpo.

—Lauren... — suspiré

—No debiste jugar con Lauren Jauregui — hablo con enojo

Abre la puerta y se acerca poco a poco hasta mi, por obvias razones me aleje igualmente. No reconozco a esta Lauren.

—Estas ebria, será mejor que te vayas — le dije un tanto asustada

Cierra la puerta tras ella y sigue su camino hasta mi.

—¿Crees que puedes engañarme y salir bien librada? Te equivocas, Camila Cabello

Mi cuerpo no encuentra escapatoria, queda prensado entre la pared y el cuerpo de Lauren, sus labios están muy cerca de los míos, efectivamente tiene aliento alcohólico.

—Basta — le suplique

Sus ojos ya no eran los esmeralda cristalinos, había sido remplazados por un verde oscuro, sus pupilas estaban demasiado dilatadas.

—Te enseñaré que conmigo nunca debes de jugar — susurro sobre mis labios

Finalmente unió sus labios con los míos de una forma salvaje. Al principio intente luchar pero extrañaba tanto sus labios que no logré resistirme a sus dulces encantos.
Mis manos se perdieron en su sedosa cabellera, su lengua se adentro en mi boca sin permiso alguno, trate de dar lucha pero era simplemente imposible, a Lauren Jauregui siempre le gustaba tener el control.
Entre más me besaba hacia más presión de mi cuerpo contra la pared. La falta de oxígeno comenzó a romper nuestro beso por un par de segundos.
Ella sonrió antes de jalar mi cabello hacia atrás un poco con violencia y volvió a unir nuestros labios pero esta vez con mayor desenfreno, la tome de la mejillas para llevar el beso a una mayor profundidad. Bajo sus manos hasta mi culo, lo apretó con mucha fuerza haciéndome gemir en el beso. Deslizó sus manos por las piernas y las elevo con fuerza para que las enredada a sus caderas.
Se abrió camino hasta mi habitación subiendo las escaleras lentamente  para evitar algún tipo de accidente debido que no dejamos de besarnos. Nos detuvimos un momento para que logrará abrir la puerta y para ello tuve que dejar de besarle pero eso no duro mucho ya que nuevamente habíamos unido nuestros labios jugando con una danza de nuestras lenguas, mordió salvaje-mente mi labio haciéndolo sangrar antes de dejarme caer con violencia sobre la cama.
Lauren subió a horcajadas sobre mis piernas, abrió el albornoz para darse una grata sorpresa sólo llevaba mis bragas, sonrió y comenzó a atacar mi cuello mediante besos haciendo que soltará varios gemidos. Mis manos intentaron ir a su espalda pero no me lo permitió, las sujeto encima de mi cabeza.

Sólo Una Noche || CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora