El secreto.

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El 15 de Agosto del 2002, una noche muy fría en Alemania. Un grupo de 7 amigos se juntaron en la casa de Diego, el dueño de la casa le propuso al grupo jugar a la ouija, todos aceptaron menos Naiara, quien le tenía bastante temor a este tema de comunicarse con el más allá, igualmente terminó siendo convencida por todos. 

Los 7 amigos se pusieron a ordenar todo para jugar, Diego fue a buscar el juego, se sentaron en ronda, todos pusieron el dedo en el mirador.

Luego de decir las palabras hicieron la primera pregunta

-¿Hay alguien aquí?- Preguntó Pablo.

Pero aquello no se movió, se estaban aburriendo de estar con el dedo allí y preguntando sin tener respuesta, hasta que lo intentó Naiara.

-¿Hay alguien aquí?- Preguntó ésta vez Naiara. El mirador se empezó a mover y se paró en el "si". Se miraban entre todos sin poder creerlo, preguntándose entre si quién había sido.

Ahora que habían "invocando" a alguien del más allá decidieron continuar.

-¿Qué edad tengo?- Preguntó Naiara.

El mirador se movió primero al 2 y luego al 3. Naiara seguía creyendo que era alguno de sus compañeros, así que prefirió preguntar algo que solo ella sabe.

-¿Cuál es mi secreto?- Ésta vez estaba tan confiada de que nadie iba a mover el mirador.
Pero se equivocó, el mirador se movió revelando su secreto
Se fue moviendo entre las letras hasta que compuso la siguiente frase

"2 de diciembre del 1997" A Naiara se le fue el color de cara y le entró  el miedo, decidió  dejar de jugar por miedo.

Les puso de excusa a sus amigos de que se sentía mal y se quería ir a su casa.

Pamela se ofreció a acompañarla, pero ella se negó. Cuando Naiara se fue, el resto decidió seguir jugando pero el mirador ya no se movía,  no respondía sus preguntas,  es como si al irse Naiara la identidad  se hubiese ido con ella.

Al llegar Naiara a su casa decidió acostarse para tranquilizarse, no podía creer que esa identidad supiera lo que ella había cometido hace un par de años, así que se acostó y decidió dormir, se estaba por quedar dormida cuando su celular empezó a sonar indicando que tenía un mensaje nuevo, cuando lo leyó se asustó, el mensaje decía: "Por más que trates de dormir no podrás, iré a  por ti, así como tú viniste a por mi matandome, sin dejarme despedirme, me arrancaste la vida, yo haré lo mismo"

Cuando terminó de leer aquel mensaje empezó a escuchar ruidos desde la planta de abajo, asustada puso seguro a la puerta, se metió bajo la cama, escuchó como subían las escaleras y trataban de abrir la puerta pero no podían, al cabo de cinco minutos de silencio decidió salir, dándole la espalda a la puerta se empezó a arrastrar para poder salir de debajo de la cama, cuando se paró sonrió triunfal, aunque dos segundos después se le borró la sonrisa, cuando sintió una respiración en la nuca y un "te encontré"...

La noche de Agosto. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora