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La felicidad se puede resumir en muchas cosas... Una familia estable y amorosa, una pareja totalmente enamorada que van a estar juntos para siempre, o incluso un exitoso trabajo; pero desgraciadamente no pude obtener nada de eso en conclusión mi vida es... Algo que se acabó y finalizó de la peor manera.

Mi nombre es Kwon Ji Yong apenas al tener dieciséis años sin estar preocupado por la vida mientras cursaba preparatoria ahí fue cuando conocí al “amor de mi vida”, alguien de quién me enamoré perdidamente aunque los dos fuéramos hombres eso no me importaba... A pesar de ser de primer grado y él de ultimo grado nos llevamos muy bien, pasó el tiempo y pudimos convertirnos en una pareja estable, con él experimenté mis primeros besos con un hombre, los primeros juegos melosos y hasta tuve mi primera vez con él, su cuerpo quemó el mío en todo momento. Pasaron los años y entonces pasó... Lo vi acercarse a mí entrando sin ningún problema a la escuela, en plena cancha de la Universidad él me pidió matrimonio frente a todas las miradas de mis amigos, compañeros y de todos los alumnos de la escuela.
No pude negarme ya que Hyun era la persona más dulce y gentil conmigo en cuanto a nuestra relación así que acepté, platicamos muchísimo sobre mudarnos a vivir juntos. Arreglamos todo y por fin tuvimos un departamento en un lugar perfecto y bien ubicado en la ciudad de Seúl, después de graduarme yo pasaba tiempo en la casa mientras que Choi trabajaba temporalmente en un trabajo de medio tiempo hasta que yo consiguiera un empleo fijo.

Todo iba de maravilla con nuestra relación, hasta que llegó el fatídico momento en el cual ya era muy tarde y él no llegaba, me preocupé tanto que lo llamé a su celular pero al escuchar el buzón de voz me desesperé tanto que sentía que me moría de la angustia, no sabía que hacer hasta que dieron las dos de la madrugada y de pronto escuché la puerta abrirse lentamente y cerrarse al mismo compás.
Lo había esperado toda la noche, pude notar su cabello negro aun más brilloso por estar mojado, su camisa desfajada y su saco muy mal acomodado mientras me evadía la mirada. Tuvimos una discusión mientras que estaba dándome la excusa de que tuvo mucho trabajo hoy y sin decir nada más se fue al dormitorio estando molesto pero al pasar a mi lado pude notar la presencia de un perfume el cual no pertenecía ni a Choi ni a mí. A la mañana siguiente seguí hablando con él sobre ese tema, se desesperó comenzando a alzar la voz.

–Ji, ¿Que acaso no entiendes que tuve mucho trabajo ayer?– dijo ya fastidiado.

–Cuéntale eso a alguien que te crea... Entonces, ¿Por que olías a perfume de otra persona? ¡Contéstame!– grité ya muy molesto y solo pude ver que se levantó para golpearme.

Caí al suelo tomando mi mejilla caliente, punzante y adolorida. Lo miré a la cara mientras que lágrimas caían por mis mejillas, él tenía un rostro serio pero su rostro empezó a deformarse entrando en pánico, se acercó a mí y me abrazó con mucha fuerza pidiéndome perdón a lo cual solo me quedé estático tras haber recibido aquél fuerte golpe. Era cierto que le tenía miedo a Choi cuando estaba enojado pero era su pareja y futuro esposo así que no podía quedarme callado, todo siguió igual ahora me rompió la nariz haciendo que mi labio superior e inferior también sangraran. Todo lo oculté debajo del maquillaje que siempre me ponía, todos los días Choi llegaba con rosas, me regalaba muchos detalles, sonrisas o besos...

Mientras él trabajaba yo tenía que seguir limpiando la casa, conocí a mi nuevo vecino de al lado llamado Lee Seung Hyun y en verdad era muy agradable, me llamó la atención sus locuras, su risa y su peculiar modo de expresarse.

Cada vez que Choi se iba yo aprovechaba para tener una conversación con Seung Hyun pues no tenía con quién hablar con naturalidad, él y yo teníamos cosas en común y ciertas diferencias que nos hacían reírnos de las rabietas del otro; un buen día se me había pasado la noción del tiempo que no me di cuenta cuando Choi llegó y cerró la puerta mirándonos con recelo desde la entrada, Seung Hyun estaba sentado en el sillón sonriendo recibiendo a Choi junto conmigo pero él con más respeto, se mantuvo serio hasta que se fue Seung Hyun y entonces demostró todo lo que había callado.

–Me das asco...– dijo sonando su voz muy grave cargada de odio. –¿Con el vecino?– se rió y me miró fijamente acercándose a mi. –Se nota que estás tan urgido por que te la metan...– dijo completamente molesto.

No pude defenderme ya que Choi siguió hablando, me tomó del brazo y me llevó hasta el dormitorio en donde me golpeó, me quitó la ropa dejando mordidas en mi piel y me obligó a tener sexo con él, técnicamente comenzó a violarme. Eso no era hacer el amor, él y yo estábamos tirados en la cama, mi cuerpo completamente lleno de moretones y él dormido en los brazos de morfeo estando encima de mi; esto no era hacer el amor y eso me quedó muy claro, solo me utilizó para saciar sus necesidades fisiológicas y no por quererme, por que al hacer el amor hay un sentimiento entre ambas personas pero... Ahora estaba completamente confundido y perdido en mis recuerdos del antiguo Hyun que era Choi y que me trataba con todo el cariño y cuidado del mundo al hacerlo. Lo extraño a él y a nadie más...

Pasaron los días y era lo mismo, llegaba tarde, discutíamos, me golpeaba o me humillaba cada vez que podía, una noche llegó totalmente ebrio y comenzó a golpearme dándome puñetazos y golpes fuertes de pronto ya no sentí nada...

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Desperté en una cama de hospital teniendo múltiples vendajes, el dolor era intenso en eso le di un vistazo a la habitación blanca dándome cuenta de que Seung Hyun se encontraba a mi lado tomando mi mano estando dormido en una silla al lado de mi cama.

–Ji...– dijo entre sueños y yo solo acaricié su cabello con calma. Él despertó poco a poco mirándome a los ojos y al darse cuenta que era yo, me abrazó con tanta necesidad.

Sonreí de lado al sentir su cálido abrazo, en mi hombro el calor de las lágrimas de mi acompañante hacían presencia. No vi rastro de Choi, cuando Seung Hyun me soltó pasaron las horas en silencio y entonces habló.

–¿Por que sigues con él?–  dijo mientras me acariciaba la mejilla y sonaba muy preocupado.

–Por que lo amo– dije sin más.

–Él te hizo esto y sabes que te puede hacer más daño, Ji por favor abre los ojos y quítate la venda que tienes puesta para ver a la asquerosa persona que es Hyun– Seung Hyun sonaba ya desesperado.

Mis lágrimas se hicieron presentes y dije. –Sólo lo hice enojar... Pero él me ama–

Continuará...

Espero que les haya gustado este capítulo, muchas gracias por leer es técnicamente segundo Gri así que espero sus opiniones :3

Gracias por leer, bye owo

Un Amor Prohibido [❤Gri❤]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora