Querido hermano

Querida hermanita

Querida hermanita:

Sé que con sólo unas palabras no bastará para arreglar todo lo que te hice, no se por dónde empezar en esta carta.

Cuando éramos niños siempre estábamos juntos; inseparables. Me gustaba ayudarte cuando tenía miedo, abrazarte cada vez que estabas triste y contarte historias divertidas hasta que te durmieras.

No sé cuándo todo ésto cambió, me gustaría haber terminado mis estudios, enamorarme, casarme y tener momentos felices contigo.

Pero eso no se va a cumplir, mi enfermedad no se curará, no quiero que sufras por mi pérdida.

Lamento haberte hecho todo, los insultos, la apuesta, TODO. Quisiera volver en el pasado y evitar que esto pasara, pero ya es muy tarde.

Quiero decirte que la apuesta fue sólo para saber si Drake lograba invitarte a una cita, pensé que lo rechazarías... Pero estaba equivocado. Cuando me enteré de lo que te hizo, recibió su merecido es por eso que no fuí a la escuela los siguientes días.

La vez en la que te humillaron y te hicieron bromas pesadas, esas personas terminaron amenazados por mi. Cada vez que llegabas de la escuela no podía mirarte a la cara porque me sentía demasiado culpable de lo que te hice, fuí un cobarde al no pedirte perdón.

Las chicas con las que estaba cada vez que llegabas de la escuela era porque me gustaba ver tu cara de enfado.

Me dió mucha risa cuando me pintaste el cabello de verde, fuí muy famoso en ese entonces (no eres muy buena con las bromas).

El jarrón que se rompió de la fiesta lo pagué yo, las veces en las que había comida en tu puerta cuando estabas castigada yo la había puesto, no mamá.

Le dije la verdad a mis padres y es por eso que te quitaron el castigo más rápido.

Tuve que comprar otro helado de vainilla y Nutella porque sé que tú te lo comiste.

Esto tú no lo sabes, pero cuando estabas dormida entraba a tu habitación y leía todas las cartas que escribías, me merezco todo tu odio y más.

No quiero que llores cuando me vaya, solo sonríe y sé más feliz de ahora en adelante. Quiero que me perdones y si piensas que es tu culpa, no lo es, si te sientes mejor yo también te perdono.

Adiós Anna y nunca me olvides.

Att. Tu hermano Jack