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por que no puedes caer lo suficientemente rápido y alcanzar el dolor de tu corazon, este se espande con demasiada rapidez, por que simplemente una mirada puede traer a tu mente todos los recuerdos que te hacen daño, como una secuencia interminable los vez pasar mientras intentas recuperar tu respiración. 

- por favor, por favor, déjame, por fabor,- sus ojos eran tan oscuros como el carbon y le trasmitian a  mi alma todos los recuerdos y sensaciones enterradas, ese es el problema, puedes enterrar algo muy en lo profundo de ti, pero al final siempre existirá un motivo, una razon o una persona para traerlo tán facil y sutimente a la superficie, que lo único que te indica que a regresado es el dolor sordo en tu pecho . 

me retorcí y grité, arrañé el aire con la colera de mis lágrimas y descarge el peso de mi cuerpo hacia atrás, el sonido sordo de mi cuerpo en el cemento rompio la escena en la que estaba y  me sumergí de nuevo a la realidad, estaba sola, no habia nada. 

mis lágrimas corrian por mis mejillas mientras me encogía de sufrimiento, y con un solo pensamiento seguí avanzando hacia las personas que para mi eran desconocidas, como robots, automatas, simples fichas en un macabro juego del destino, nunca podré olvidarlo, nunca podré ser normal, podré ocultarlo, pero al final, siempre estará ahí, no se puede deshacer el pasado. 

aveces el peso de tus acciones es demasiado pesado para un cuerpo tan fragil, partido y debíl, como una hoja partida en diminutos trozos que nunca sanarán, solo  te mantendrán unida, pero nisiquiera habrá fuerza, simplemente resistencia, una resistencia a  una vida que no quieres vivir. 

tendrás que aprender a vivir en la oscuridad y mirar con anhelo los deseos mas mundanos, por que nada te llena, nada lo hace. 

Puedes atesorar algo banal o mantener tu mente ocupada de cosas vacias, pero pronto el significado del amor será desconocido para ti, y los mareos y el dolor de cabeza seran cada vez mas frecuente, intentaras poner en palabras tus retorcidos pensamientos pero lo unico que saldrá sera una parte falsa de ti que finge ser feliz y habla sobre un dolor comun. 

no voy a mi siguiente clase,  cuando salgo el sol está en lo alto y mis ojos duelen al observarlo, el aparcamiento está lleno y el leve sonido del viento es lo unico que rodea aquel  lugár vacío, mi piel arde, puedo sentir como el sol se refleja en mi pálida piel  tiñendola de un leve color rosa, camino entre los coches buscando consuelo, imaginando que soy otra persona, pienso en venas rotas y en caminos de sangre que llenan al silencio, mis pensamientos siguen  y siguen, como un loco que persigue lo prohibido. 

me detengo solo cuando estoy al final de aparcamiento, frente a una balla de color gris y con la mayoría de sus partes oxidadas, luego de pensarlo un momento  me encojo de hombros y empiezo a escalar, cuando estoy a dos metros del suelo empiezo a sentír un poco de pánico pero lo ignoro, debo seguir, realmente quiero salir de aquí, caminar sin rumbo fijo, saltar los adoquines o contar las estrellas, algo que me haga menos miserable. seguir mi muy común rutina de simplemente evadir y enterrar pensamiento suplicando por que algun día el cansancio de existir los consuma.

Finalmente mis pies tocan el suelo al otro lado de la calle, los carros pasan y algunos lanzas improperios entre si o al tráfico, camino sin un rumbo fijo.

Ahora nisiquiera puedo llorar, me gustaría, pero ahora no puedo tener el alivio que ellas me proporcionan, al parecer su tarifa de sufrimiento a ido creciendo, como el drogadicto que siempre necesita más para abandonar el razocinio de este mundo, las palabras mueren en mi mente y camino con la velocidad de mis pensamientos.

me detengo solo para comprar una botella de agua, el sol es demasiado intenso y mi piel arde. 

es increible la forma en que los humanos soportamos tanto dolor simplemente por unos segundos de placer, nisiquiera puedo recordar lo que soy o lo que fui, tal vez simplemente no soy nada. 

Nose cuanto tiempo estuve caminando sin un rumbo fijo, como si mis pies no pudieran ser realmente rápidos y capaces para librarme del camino, pero no es específicamente este lugar el que quiero abandonar, es el que camina ahora mismo conmigo, mi cuerpo, me detengo en una vieja silla de color blanco, la pintura se cae en pequeños trozos y la madera huele a sol y hierbas, inhalo el olor del lugar, es agradable, hasta tal punto que no tengo suficiente de el, inhalo cada vez más profundamente, llenando mis pulmones con el aroma, cierro mis ojos para que el olor sea más intenso, para que se quede grabado en mi cerebro, debí caminar mucho y salír hacia un pequeño sendero alejado de la ciudad, es perfecto, con ese pensamientos mi cuerpo cayo sin sentido mientras todo seguia dando vueltas y mis dedos temblaban. 

la luz es demasiado intensa para unos ojos acostumbrados a la oscuridad , mi respiracion no puede escucharse sobre el latido de mi corazón, hay demasiado ruido, escucho palabras, pero nada parece tener sentido, es como si estuviera muy dentro del agua y mis oidos cantaran  canciones de dolor. 

cuando abro mis ojos, Café, es el único color que veo, hay un poco de oro y onix en ello, es una mezcla extraña.

-Elena-

¿Matheo?...

Los 97 Dias de ElenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora