Luke Adriano Alberti es el hombre ideal, joven, guapo, adinerado y exitoso empresario heredero de una de las cadenas hoteleras mas importantes de Europa y Venezuela. Hoteles Gerona, pero mas allá de su grandeza es un hombre de buen corazón atormenta...
Capitulo #19 "Cuando creo que ya te he olvidado, descubro que aun te amo."
No se que demonios estoy haciendo pero creo que es demasiado tarde para arrepentirme.. ya que siento la manilla de la puerta moverse.
retrocedo unos pasos concentrándome en no parecer una loca, acosadora y tratando de algún modo tranquilizar los latidos de mi corazón que se dispararon cuando comenzó a subir el ascensor..
bien tu puedes hacer esto solo tienes que respirar- me dije me
Cuando la puerta termino de abrirse, mis ojos conectaron con los de un Adriano, Palido, ojeroso y sin camisa. Que trasmitía todo menos alegrías.
en mi Estomago se instalaron un montón de mariposas que revolotearon sin parar cuando mi mirada recorrió su torso desnudo.
Carraspie antes de hablar.
-Hola!- Mi voz sonó mas como un susurro.- ¿Estas bien?- pregunte un poco preocupada por lo demacrado de su cara.
la sorpresa reflejada en los ojos de Adriano no cambiaron fácilmente, y sacudiendo un poco la cabeza pasando su lengua por unos labios un poco reseco hablo con voz ronca.
-¿Que haces aquí?-Pregunto ignorando mi pregunta.
Aunque su tono no era cortante ni pedante decidí hacerme un poco la ofendida levantando mi ceja derecha ...
- Pues, quería saber de ti.- Replique sinceramente.- Pero en serio ¿estas bien?
a pesar de su pésima condición en su boca se dibujo una sonrisa muy tierna, tan tierna que me hizo recordar cuando a veces se engripaba y solo deseaba que yo lo consintiera y lo curara.
Decía que le encantaba escuchar los latidos de mi corazón mientras su cabeza reposaba en mis pechos... que tiempos aquellos.
-La verdad me siento pésimo, comí algo que me cayo muy mal y eso sin contar que creo que tengo Amigdalitis ..-Arrugo su cara para después llevarse las manos a su boca justo en el momento en el que le vino una arcada..
Sin decir palabra salio disparado hacia el interior del apartamento y yo como buena curiosa y sin pedir permiso me adentre al espacioso y lujoso lugar, cerrando la puerta detrás de mi.
El piso de Adriano era inmenso y con aire sofisticado, todo estaba impecable y sin rastro de suciedad por ningún lado.
Solté un silbido de aprobación por la grandiosa vista que tenia, desde aquí se veía parte del centro de la ciudad, pero mas impresionante aun se veía la impetuosidad del valle de montañas que rodeaba Caracas.
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lastima que la primera vez que vine no pude deleitarme y observar lo hermoso de lugar.
Como no, si estabas ocupada haciendo otra cosa- me regaño mi otra yo.
