Welcome To My Life ||We Took a Chance Temporada 2|| Narry|| Lilo|| AU||

Capítulo 4: Decisiones e indecisiones

-¿Puedes dejarme tu teléfono? Tengo el que me regalaste pero no tiene línea. La cortaron.

Liam respondió alargándole su teléfono. Louis marcó a alguien y dio una explicación rápida de porqué no iba a volver a donde quiera que iba.

-No, Niall, no estoy haciendo un trabajo... estoy con Liam.

-¿Un trabajo?

-Yo... yo... te lo contaré...

-¿Niall es tu nuevo novio?

-No, absolutamente no. No hay nadie en mi vida.

-No te culparía, por lo que dices mis padres se han portado muy mal contigo.

-No y no vuelvas a insinuar algo similar.

-Está bien.

-Ése era mi cuarto. –dijo Louis – mañana traeré mi ropa.

-¿Necesitarás ayuda con las cosas?

-Todo cabe en dos bolsas. Yo... tengo algo de hambre, pero creo que el refrigerador estará vacío. Voy a pedir una pizza...

-Yo pago.

Louis agachó la cabeza. No quería admitir que no le llegaba el dinero, pero tampoco aprovecharse de Liam.

-Louis, mis padres nadan en dinero. Yo pagaré la pizza y mañana lleno la nevera.

-De acuerdo.

Niall estaba cansado, muy cansado.

Manipular la silla de ruedas y el peso de Harry era difícil.

Y además había decidido esforzarse en estudiar. Se acercaban exámenes y la prueba de acceso a la Universidad, la evaluación... había visto cómo vivía Harry y quería que se sintiese orgulloso y ser alguien a su altura.

Iba a lograr acceder a una buena Universidad y tenía que sacar unas notas excelentes todo el año.

Su madre le había preguntado por su novio, y Niall le había contado que sus padres se habían mudado y él con ellos.

Probablemente no lo creía, pero no era como si fuese a contarle la verdad.

Cerró el libro de Historia de América y se apretó las sienes.

Zayn se materializó tras él.

-Si sigues tan aplicando, me dejas sin trabajo.

-Voy a esforzarme.

-Harry hizo la fisioterapia.

Niall miró el vacío. Recordó su rostro dolorido, su rictus de sufrimiento y el sudor.

-Mañana tienes que lograrlo otra vez –dijo Zayn simplemente.

Y desapareció.

Harry odiaba tener que ser asistido para asearse y acostarse. Pero ya estaba en la cama, con su televisor y un fuerte dolor en el culo y no por haber follado.

Probablemente no follaría nunca más.

Como todo lo demás en su vida.

Se fijó en la pantalla, un programa de telerrealidad sobre mujeres ricas.

Ese chico irlandés le había provocado cosas. Por algún motivo no quería decepcionarle ni parecer débil ante él.

Por algún motivo quería... agradarle.

Mejor se ponía a dormir.

Nunca le iba a agradar a ese chico ni a ningún otro, nunca más.

Mejor empezaba a asumirlo.