Demaciado Tiempo (Sin Ti)

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La campana de la escuela sonaba, indicando la salida de las aveces largas clases y otras no tantas.

Su mundo había cambiado demasiado, bueno, ahora estaba un poco más maduro que antes pero su capacidad vocal era buena. Sobre todo cuando llegaba a resfriarse y cantaba sin problemas de nada. Aún al pasar de los años, su clase menos favorita era obviamente la de escribir. Donghyuck solía ser más lúdico para de lo que artes escénicas se trataba.

Como él estudiaba música, con el pasar de los años había optado por bailar también. Nunca sabría si algún día podría estar en algún grupo de esos de la televisión que salían cada dos por tres en su país.

Sus padres habían vuelto en una relación, lo que era lo más extraño tomando en cuenta que se habían divorciada pero el creía que era porque eran demasiado jóvenes cuando lo tuvieron o algo parecido. Ya no era un niño, pero aún así ya se había acostumbrado y los apoyaba.

No sabía nada de Mark de no ser por su ahora amigo TaeIl, quien a pesar de todo, lo acompañó en esos momentos difíciles y guardó sus sentimientos por él, respetándolo después de todo. Si. El era una persona admirable aunque fuese dos años mayor.

Todos estaban bien. Cada año se sumaban más y más chicos a su clase de canto, mientras el iba a estas y a las de danza a veces.

Por la mañana, se despertó temprano con un pegadizo tono de esos que no desesperan tanto.

Why so serious....get your crayon, get your crayon

Apagó rápidamente la alarma, dejando caer su teléfono a la alfombra.

Tendría una presentación en un gran teatro ese día.

Revisó la hora mirándolo desde su cama y estaba justamente casi al límite. Era eso o perder el autobús, el cual al fin y al cabo no estaba dónde debía estar, osea, frente a su casa.

No desayuno, era muy tarde.


Camino al otro paradero  justamente para su suerte, el bus estaba ahí. Corrió veloz y lo alcanzó, sentándose rápidamente para luego desenredar sus audífonos y  escuchar la relajante música americana que le gustaba. Sin duda esos cantantes pronunciaban tan bien, pensaba el chico.

El frío lo azotaba de una manera al haber llegado a la escuela . No se iba caminando porque regresaba involuntariamente a hace un tiempo atrás, sonriendo con nostalgia pero aveces extrañando a cierto hyung que tenía que decía que iba a llamar y nada de nada. Ni siquiera un mensaje, pero no se enojaría por eso. Total, el estaba aún en Canadá.

Y sus pensamientos al caminar con pasos continuos hasta la entrada se repetían "poco tiempo..¿Poco tiempo son acaso tres años?” Pensaba con algo de rencor. Años en los que tuvo que convivir con presiones y cosas por aquí y por allá y Mark brillaba por su ausencia.

“Estupido Mark abandonador”

Un montón de chicos, bueno más bien chicas  estaban acumuladas en una sección de la escuela en dónde solo podía pasar una cosa : Alguien que pasaba por la escuela y se había ido, volvía.

Su estómago se contrajo derrepente, creando un tic nervioso al mover su pierna una y otra vez, casándose a ratos. Respiró pesadamente y asomó su cabeza hasta que vió a una chica que se había ido hace mucho tiempo. Lástima. No era Mark

Por un milisegundo, esos sentimientos tan bonitos y preciados volvían pero no realmente desde que dejaron de verse. Era algo que iba a pasar y lo aprendió de una manera un tanto cruel para su torpe corazón.

OlvidameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora