Oneshot, medio lemon: Ranma 1/2

Shampoo/Kuno y Ranma/Kodashi

Como mi niño rey gore es tan cansón y me pidió esto, tocó. Creo que al igual que yo, uno por los amigos hace cualquier cosa. Él y yo tenemos gustos muy diferentes; y somos diría que opuestos pero....somos amigos. Por eso y solo por él, haré esto. Quien me haya leído sabe que yo siempre hago parejas oficiales (generalmente, lo que está pasando con mi fic de Ranma es una rara excepción) ok y como ya hablé mucho y tengo que empezar el fic, empecemos.

Narra Shampoo....

¡¿Cómo fue que terminé metida en una cama con Kuno Tatewaki?! La verdad no tengo ni la menor idea porque no me acuerdo de nada. Lo único que recuerdo de esa noche es el fuerte sabor a licor que me quedó en la boca cuando desperté. El dolor de cabeza que me acompañó todo ese día fue terrible; la sed, los morados en mi cuello y la borrosa imagen de su cuerpo sobre el mío, me atormentó todo ese día.

Kuno no es feo, no es que me sea indiferente en ese aspecto pero, perdón, no debería reírme porque lo que él tiene es una cosa seria pero, ¡fue graciosísimo! Es increíble que los rumores que escuché sobre él fueran ciertos. ¡Aun no lo puedo creer! No recuerdo cómo fue que me convenció de entrar a su casa y mucho más a su cama pero ahí desperté...

Sobre su pecho y pensando que era mi amado Ranma el grito que di cuando lo vi, lo asustó tanto que se cayó de la cama. Luego volvió conmigo, se sentó y de la manera más tranquila y relajada que encontró me contó lo que habíamos hecho.

Mientras me iba contando, imágenes (unas muy borrosas por cierto) iban llegando a mi atribulada cabeza. Es el colmo conmigo. ¿Después de lo que me pasó con Ranma no aprendí la lección? ¿No fue suficiente humillación cuando él me rechazó después de lo que vivimos? Qué horror. El último lugar en donde quería estar era en una cama con un chico que no me atraía tanto como para haber llegado tan lejos. Ahora que lo pienso ¡ah, qué carajo! Sí fue muy bueno y aunque duro poco, me divertí. No pero lo que más gracia me causa ahora, es recordar su expresión. Con que orgullo me decía todo lo que pasó, si él supiera...No sacaría tanto el pecho en señal de orgullo y alegría; sus proezas no son tan buenas. Pero en fin... ¿en qué iba? Oh, sí, mi noche de "pasión" y lujuria con Kuno. No fue algo tan memorable pero fue agradable.

Él estaba sentado a la orilla de la cómoda y lujosa cama de su amplia habitación y me miró muy sonriente mientras me contó. Me dijo que no debía sentirme mal por lo que había pasado entre nosotros porque primero: Él nunca diría nada y que segundo, yo era una de las mujeres más hermosas con las que él hubiera estado; ok, eso sí era verdad. Como yo no me acordaba de nada y mi memoria estaba por pedazos... él se encargó de hacerme recordar todo antes de hacérmelo una vez más.

Dijo que cuando yo llegué a su casa y llevé lo que había pedido al restaurante de mi bisabuela, se sintió muy mal al verme tan triste. Ah.... ¡eso fue! Kuno, miserable... se aprovechó de mi depresión para emborracharme y hacérmelo. Total fue que sí, así fue. Él abrió una costosa botella de whisky y sirvió dos copas. Me preguntó qué me pasaba y porque me veía tan triste. Me dijo que yo era una mujer demasiado bonita y dulce para estar sufriendo por alguien que no lo merecía. Yo no quería escucharlo pero era verdad. ¡Era completamente cierto! Siempre he sido demasiado mujer para Ranma, de esa trágica noche con Kuno llena de insatisfacción y resaca, al menos quedó algo bueno. Descubrí lo que en verdad debe ser el amor al volver al otro día a trabajar y ver con que cariño Mousse me recibió.

Kuno me dijo que después de que tomamos y resultamos comiendo solo nosotros dos porque Kodashi nunca apareció, empezamos a charlar y a reír. Me contó que después de un rato de charlar y beber, yo me levanté para irme pero que cuando me tambaleé y él detuvo mi caída, nuestros rostros quedaron tan cerca que él no se resistió a la tentación de besarme. Si, mientras lo decía lo recordé. Ummmm sí, su beso me gustó. En ese momento a pesar de los tragos y el mareo, cerré los ojos y pretendí que quien me besaba no era él, era el hombre que yo creía amar y que me había partido el corazón. Imaginé que su apasionado beso y sus inquietas caricias por mi espalda (y que luego se concentraron en mi trasero) eran las de él, imaginé que era Ranma quien quería hacerme suya en ese momento...