"SAVE ME"

SOMBRAS

Desperté como de costumbre, en la cama del hospital. De nuevo tenía que permanecer allí tras una lesión. Como de costumbre estaban mis padres, sentados en un sillón grisáceo y mullido, a mi lado. Me abrazaban tiernamente tras mi despertar. Ellos también estaban allí, conmigo. Suelen seguirme siempre, a todas partes. Sus rostros, deformes y tétricos, suelen atemorizarme constantemente. Hay noches en las que no duermo. Me la paso despierta, escuchando sus irritantes voces que continuamente me susurran cosas relacionadas con el suicidio. Con el mío.  No les escucho, o pretendo no hacerlo, pero hay veces que no puedo evitarlo y me golpeo contra las paredes intentando calmar sus voces. Por suerte mis padres están ahí para ayudarme en todo momento.
En ese instante, la enfermera vino acompañada del doctor que me atendía. La mujer se llevó fuera a mis padres para conversar con ellos. Yo me quedé a conversar con el doctor, el cual me quitaba delicadamente los diversos cables que enganchaban de mi brazo. Las sombras seguían allí, quietas. Acechaban cautelosamente al señor. Mi expresión debió de ser extraña, pues el doctor miró hacia atrás curioso. Cuando terminó me sonrió y me indicó que ya podía marcharme junto con mis padres a casa. Me reuní con ellos en recepción. Me esperaban impacientes, para subir el coche de regreso a mi hogar. Tenía un perro. Sufrió un accidente. Un lunes por la tarde, estaba a solas con mi perro en casa. Cayó desde le balcón de un cuarto, y cuando me quise dar cuenta, lo único que quedaba de él eran sus órganos y sangre, derramados por el suelo. Los vecinos me culparon de su muerte, y a causa de ello, ahora voy a un psicólogo todos los fines de semana. Traté de explicarme por aquel entonces, pero mis palabras para ellos eran mudas.
En el coche, conversaba con las sombras, tratando de contarles que estaba bien, y que aún no iba a morir. Mis padres me escuchaban en silencio. Mi madre, quien me miraba constantemente, lucia más seria de lo habitual. "¿Qué estará pensando mamá de mi en estos momentos?" pensé. Traté de ignorarla y seguir con mi conversación. Después de cinco minutos, me acordé de Shade, mi mejor amigo. Seguramente me esté esperando impaciente en casa. Enseguida me reuniría con él.....no faltaba mucho.