Y llego el momento. Entrar por esa puerta. Tal vez parecía una gran tonta ahí parada sin hacer nada, tal vez parecía fácil pasar hacia la gran fiestaPero saben que?
No lo era!
Sentí la presencia de Bryan atrás mío, y eso podría ser un buen indicio para ya animarme
- Bueno, ¿estás lista para una noche inolvidable?- y que iba a serlo no cabían dudas
-La verdad, no
- Vamos Em, yo sé que tú puedes
- Ok, lo intentare- y dicho eso abrí esa puerta y al entrar pude apreciar mucho más fuerte la música
La fiesta se resumía en: alcohol, adolescentes bailando, cantando y besándose por todo el espacio de la casa, y cuando digo todo, créanme, es TODO
En fin, me puse a bailar uno de mis temas favoritos, que estaban pasando, evitando algunas miradas
Si, suena muy triste eso de bailar sola, pero ya estaba algo acostumbrada
Así pase un largo rato, ahí viendo a los adolescentes bailar mientras yo también lo hacía
La verdad, ya me estaba aburriendo de esto
¿Les digo algo extraño?
Algo extraño era que todavía no vi a mi hermano. Seguro estaba en algo más importante que su patética hermana menor. Bueno, por otro lado mejor que no se apareciera, así podía buscar formas de olvidarme del único chico que comenzaba a interesarme en lo que iba de mis dieciséis años de vida, ósea Dylan
Bueno, como ya dije me estaba aburriendo bastante, por lo que me dirigí hacia la cocina
Estaba sirviéndome un vaso de jugo de naranja con apenas una gotita de Vodka
Estaba por probarla, hasta que siento que alguien me arrebata el vaso rojo de mis manos y labios
- Oye, ¿que te pasa?- me queje antes de levantar la mirada. Y cuando lo hice, vi frente a mí un chico de pelo color dorado como sus lindos ojos que me estaban penetrando con la mirada
Era un chico muy her...
Lindo!
Si, lindo pfff no es para tanto
Ema deja de engañarte
¡Basta conciencia!
- No puedes tomar, eres menor- hablo por fin el chico lindo, que por cierto no sabía su nombre
- Y a ti qué te importa si tomo o no siendo menor. Apuesto a que tú hacías lo mismo desde los catorce años, y además de todo, no me conoces y yo menos a ti- estaba algo enfadada pero confusa
- Tu hermano nos encargó a mí y a algunos más que te controlemos- ya entendí absolutamente todo, y yo que pensaba que me iba a dejar tranquila y olvidada toda la noche. JA! eso es imposible- y si, hacía eso desde los catorce años- probó un poco del contenido de MI vaso y dijo- además de que yo le ponía más alcohol, así que supongo que Logan no tiene nada de preocuparse contigo. Excepto por...
-Por...?- insistí para que termine su oración
- Emm.... porque... sos... muy linda, no le digas nada a tu hermano porque me mata- dijo lo último demasiado lento teniendo en cuenta lo lento que dijo lo anterior
-Ok, no le digo, porque sé que es mentira y me lo dice por lástima
-Eh? No. Claro que no, si fuese así no te diría que no le cuentes a tu hermano- y ahí fue cuando se me ocurrió una idea
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Sin suerte
Teen FictionMe llamo Ema Stuart y tengo 16 años Siempre soñé con un príncipe azul que sea mi verdadero amor Toda la vida fui una chica sin suerte, al contrario de mi mejor amiga Mía Miller. Ella siempre tuvo miles y miles de pretendientes, pero al igual que...