Kim Yerim abrio sus ojos despacio, sintiéndo que podría firmar en ese mismo instante un acta de matrimonio para casarse con su cama. Si, así es, así de bien se sentía estar recostada en ese momento. Solía pensar a menudo en cosas así especialmente por las mañanas. Sin embargo, obligada por su consciencia, alzó su mano para alcanzar su teléfono, siendo algo extraño de su parte ya que probablemente en un día normal no se preocuparía en absoluto pero algo le molestaba, así que eso hizo, cuando vio que no había nada importante y además que era domingo, devolvió su cabeza a la almohada.
Ya mañana lunes debía preocuparse de la hora y todo lo demás, lo prometía, pensó con firmeza sin costarle volver a quedarse dormida.
Por el otro lado, Wendy salia de su habitación con la típica mueca zombie de las mañanas, lo cual ya era costumbre. Avanzó por el pasillo a paso lento, ya que sentía que podía despertar a las demás, pero al escuchar a alguien ducharse sin el mínimo cuidado por el ruido perdió cuidado. Era extraño que alguien se levantará tan temprano como ella pero bueno lo dejaría pasar, se encogió de hombros y siguió su camino.
La vocalista principal entró a la cocina, con la mentalidad de comer algo, tenía hambre por lo que se acercó al refrigerador concentrándose unos segundos en el interior de este. Era una mañana tranquila o eso quería pensar, hasta que de repente se escucho un ruido brusco proveniente desde una de las habitaciónes. Wendy se asomó por la puerta con sus cejas alzadas viendo a Seulgi en el suelo enredada con sus sabanas, su lucha por zafarse fue todo un chiste y Wendy no movio un dedo ¿por qué arruinarlo? La primera risa del día debía disfrutarse. La chica oso no tardo en escucharla por lo que al terminar de desenredarse, se levantó con rapidez cambiando su expresión.
-Estoy bien, gracias- Le recriminó
Wendy siguió sonriendo -Buenos dias-
Desde la partida de Irene hacia Daegu, Seulgi estaba actuando raro, no por sus caídas matutinas, eso era normal, sino por el sentido de responsabilidad que creía tener y nadie podía sacarle de la cabeza. Yeri se lo comentó a Wendy luego de que la regañara, o más bien intentará regañarla, por no responderle el teléfono cuando salió y Joy también lo supo luego de que Seulgi se hiciera cargo de las compras del dormitorio. Ambas situaciones muy extrañas y que terminaron en caos. Tenía mucha suerte de haber podido ocultarle bien a Irene de lo que había estado pasando pero considerando la cantidad de días que habian pasado, en verdad tampoco habían estado tan mal. Solo tenían que tener un ojo más puesto en la chica oso de la casa.
-¿Todo bien? ¿Que tal dormiste?- Preguntó la "nueva líder"
-Igual que siempre- Wendy le resto importancia mientras seguia revisando el refrigerador con total calma debatiéndose entre dos posibles menús pero nuevamente fue interrumpida, ahora al oír un celular sonar.
-¿Quien llama tan temprano?- la vocalista principal se pregunto al percatarse que se trababa de su propio telefono, suspiró dirigiéndose hacia el - ¿Aló?-
-Seungwan-ah- Irene habló con energía
-Ah hola Irene unnie- respondió Wendy viendo como Seulgi fruncia el entrecejo
-¿Por que te llama a ti?- Cuestionó la chica oso en un susurró- A mi me dejo a cargo-
Aquí iba de nuevo.
Wendy alzo una ceja alejándose del teléfono un segundo- ¿Cuando se supone que dijo eso?- susurró
-Bueno, no lo dijo literalmente, pero yo comprendí sus señales-
Wendy volteó sus ojos y devolvió su atención a la llamada, pero la chica oso se apego al teléfono también con su oreja.
-¿Esa es Seulgi?- preguntó la verdadera líder.
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Red Velvet Family
Fanfiction-Estas castigada- señaló - Nada de salidas del dormitorio- -¿Y las prácticas en la compañía? - Yeri respondió con una sonrisa -Bien, entonces...-La líder pensó rápidamente-... Nada de televisión- -La televisión esta rota- la menor volvió a contraat...