Capitulo 3-.

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Habíamos acordado que el seria mi sirviente en tanto el recordaba y mi manera de pagarle seria dándole asilo, comida e higiene. Solo las básicas cosas para vivir.

-¿Qué es todo esto?-pregunte anonadada. La mesa estaba repleta de comida que ni siquiera sabía que tenía.

-El almuerzo ¿No es muy obvio?-dijo mientras ponía sobre la mesa dos vasos para el jugo.

-Oye muchacho, ¿De dónde sacaste esto?... ¿Carne a la olla?-pregunte al darme cuenta de lo que había en el plato.

Carne a la olla o Carne Mechada como yo le decía, era la comida mas deliciosa del mundo, mi madre adoptiva siempre que llegaba con una buena noticia preparaba ese platillo acompañado de patatas fritas o con arroz.

-Tenía dinero en mi bolso, Salí al supermercado y compre algunas cosas, solo te prepare algo rico-dijo como si nada, yo estaba tan emocionada hace 2 años que no comía ese plato, lo abrace fuerte.

-Eres asombroso Lindo-le dije súper feliz-Gracias-

-¿Lindo?-pregunto sonrojado.

-Es que no se tu nombre... y tu menos-le dije riendo mientras deshacía el abrazo- así que te diré Lindo-le di un corto abrazo.

-Soy tu sirviente no tengo derecho a que me digas así-me explico.

-Te diré Lindo y punto, eres mi sirviente así que no te niegues-le ordene frunciendo el ceño.

El asintió y nos sentamos a la mesa a comer el gran festín que el preparo. Era tan delicioso y lo felicite.

-Tienes carne...-le dije mientras miraba en su labio un trozo de carne.

-¿Tengo algo en la cara?-pregunto tomando una servilleta para limpiarse la mejilla.

-No, bueno si...-me acerque y roce mi servilleta con sus labios para limpiarlos, eran tan geniales. Me pregunto que se sentirá besarlos...abrí mis ojos grandes y me aleje de manera brusca.

-Gracias- dijo parándose de la mesa a recoger los platos y luego lavarlos.

Pasaron días y el era asombroso, cocinaba, hacia el aseo, bailaba, su letra era hermosa y cantaba, y si que cantaba divino, cuando entre a la casa y escuche su voz, me emocione al punto de llorar.

Por supuesto que él me regaño por haber llorado, el ya me había dicho que las lagrimas son muy importantes y blablablá, pero no lo pude evitar su voz era hermosa, por un momento creí que era un ángel quien cantaba.

Ahora estaba esperando a un compañero para cenar, más que compañero era un amigo, se llamaba Daehyun, venía a dejarme un guion que me quedo en su casa una vez que fui para hacer un informe en pareja, ese guion era mi favorito, lo había escrito sobre mis sueños.

Soñaba que era pequeña y tenía un amigo, con el cual siempre jugábamos a la rescatar a la princesa, a cocinar y demás. Creo que puede ser algún recuerdo de mi niñez, muy ambiguos recuerdos, pero así era.

Sentí como tocaban la puerta y fui abrir, pues Lindo estaba terminando de poner la mesa.

-Hola ¿Trajiste el guion?- le pregunte.

-Sí, intacto ni siquiera lo leí-dijo bien campante.

-¿Así?-le pregunte decepcionada. Espere que leyera mi guion para tener un tema de conversación.

-Sí, esta como tú lo dejaste-

-Ya bueno pasa-le dije quitándole el guion de las manos.

Lo hice pasar y Lindo le saludo-Hola-lo examino de pies a cabeza y me miro, se dio cuenta de inmediato que estaba triste.

Durante la cena ni le hable a Daehyun , solo comía y él hablaba todo rato. En cuanto el se fue Lindo coloco su mano en mi hombro.

-Quiero leer tu libro- dijo sonriendo.

-No lo creo, nadie lo ha leído antes-le dije mirándolo triste.

-En ese caso, quiero ser tu primer fan-dijo quitándome el guion de las manos.

El en cuanto empezó a leer mi libro, fue como si todo el mundo a su alrededor existiera. Así que me fui a costar y a la mañana siguiente cuando baje a desayunar el estaba poniendo la mesa con una mano y con la otra sostenía mi libro mientras lo leía.

-Lindo ¿Madrugaste?-

-Shhh, me faltan solo una página- dijo sonriendo.

-O-Okey- Tartamudee mi respuesta, estaba demasiado emocionada, ya quería saber su respuesta. Pasaron los minutos y luego vi como el cerro el libro.

-Eres genial ¿Hace cuanto lo terminaste de escribir?-pregunto sonriendo mientras dejaba el libro en la mesa y se ponía a desayunar junto conmigo.

-Hace...-no me dejo terminar.

-¿En qué te inspiraste?-pregunto mas emocionado-No, no, no, no, mejor ¿Cuándo lo publicaras oficialmente?- se dio cuenta que me interrumpió y suspiro-perdóname, es que tu libro me hizo teñir como un niño de nuevo, fue algo...mágico-me dijo sonriendo, al verlo sonreír sentí como algo dentro de mí se movía, creo que me había enamorado.

-No responderé preguntas hasta cuando lo publique oficialmente- le dije riendo.

-¿Qué? Nooo, vamos (Tn) dime soy tu mayor fan por favor-rogo abrazándome fuerte.

-No te responderé, basta me haces sonrojar- le dije riendo.

-¿Cómo no sonrojarte si lo que acabo de leer fue caído del cielo?- dijo emocionado.

-Como tu voz cayó del cielo querrás decir-le elogie.

-Ya se, si te canto ¿Me respondes?-pregunto feliz.

-Okey, cántame y te respondo- le ofrecí y el se puso a cantar.

Luego de eso lo único que recuerdo es que mi sonrisa no se borraba ni dormida, es mas se me entumecieron las mejillas de tanto sonreír. Lindo era fabulo en muchos sentidos, fue una bendición que Dios lo haya puesto en mi camino.

El Sirviente [Zelo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora