Guardería Amino - Salón 12 - Clase Especial
Viernes 15:32pm
- ¡WAAAAAAAA! - Lloraba la bebe en brazos del muchacho despeinado y con ojeras - ¡WAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!
- Ya, ya, Pinky deja de llorar... - Le suplicó mesiendola mientras servia leche en varios vasos - ¡SASOR BAJA DE AHÍ! - Le gritó a la niña que de alguna forma había conseguido subir al borde de la ventana.
- Me pregunto que pasará si me caigo... ¿volaré? - Se habló a si misma asomándose aún más. El joven, cansado y con la niña aún llorando en brazos, corrió a quitarla de ahí y cerrar la ventana.
- ¡Maestro Mark se golpeo contra la puerta otra vez! - Gritó un niño señalando a otro tirado en el suelo cerca de la puerta - ¡Mina lo empujó! - Explicó mientras que con la otra mano pintaba la pared.
- ¡Cállate Hoseok, no seas pendejo! - Una niña de mal humor pero con voz adorable le dio un golpe en la cabeza. Este se sobo y la miró molesto
- ¡Maestro, Mina esta diciendo malas palabras otra vez! - Gritó.
- ¡Chinga tu pito pendejo! ¡Yo no digo malas palabras! - Se abalanzó para atraparlo pero este salió corriendo metiéndose detrás del maestro.
- ¡Ya no peleen! - Los regañó, pero lo ignoraron, Mina siguió intentando atraparlo mientras Hoseok se escondía detrás de sus piernas.
- Me pregunto que pasará si meto mi dedito en este enchufe... - Habló Sasor acercándose al tomacorriente.
- ¡Sasor no! - Corrió a ella otra vez sosteniéndola bajo su brazo.
- ¡Espera Mina, hagamos tregua! - Pedía el niño pasando por debajo de las piernas de la mujer.
- ¡¿Me quieres ver la cara de estúpida?! - Metió su mano entre las piernas del hombre y tomó el cabello de Hoseok - ¡Ahora si te agarre pendejo!
- ¡Penejo penejo penejo! - Cantaba animada Pinky en brazos.
- Maestro - Una tímida niña tiró de su pantalón - Tae esta con el cuchillo otra vez... - Murmuró.
- ¡TAEHYUNG SUELTA ESO! - Caminó a el lo mas rápido que los niños colgantes se lo permitieron.
- Vamono a la verga wey - Dijo antes de meterse bajo la mesa con el cuchillo en mano.
- ¡WAAAAAAAAAAAA! - Pinky había comenzado a llorar otra vez.
- ¡Suéltame! ¡Te acusaré con el maestro! - Pedía Hoseok.
- ¡Maldito peluquero! - Mina seguía tirando de su cabello.
- ¿Quiere pelea prro? - Jugaba Tae bajo la mesa.
- Maestro, cuando inventaron el reloj, ¿como sabían la hora? - Preguntó Sasor.
- Mark, cuidado con la... Olvídalo - Negó JiYeon al ver que Mark volvió a golpearse contra la puerta.
«¿Por que no estudié? ¿Por que no fui ingeniero como mi primo Francisco? ¿Por que mi salario es tan bajo? ¿Por que mi novia me dejo?» El joven se lamentaba con una mirada vacía a la nada, mientras la clase era un caos. Miró una cuerda de saltar que le pareció tentadora, pero una irritante melodía le dio una pequeña luz de esperanza.
*Soooy Peppa oink oink*
- ¡Miren niños! ¡PEPPA! - Gritó apuntando al televisor mientras apresurándose a tomar el control remoto y subirle el volumen.
- ¡WIIIII! - Gritaron los niños mientras corrían a sentarse a sus sillitas frente a la TV.
El muchacho suspiró aliviado y colocó a Pinky en su sillita especial de bebes, ella ya estaba grande para eso, pero tenia cinturón, y era una menos que controlar. Les sirvió sus vasitos de leche y sus galletitas, para luego sentarse en una silla no muy lejos a observarlos. Cualquier persona los vería como niños normales, pero el sabía que eran monstruos en piel de corderitos adorables.
- ¡Peppa Peppa Peppa! - Cantaba Pinky mientras se untaba el relleno de las galletitas por la cara.
- Amo a esa cerda pendeja - Asintió Mina mientras se llenaba la boca de galletas.
- Mi mami dice que Peppa es un jamón jijiji - Rió Sasor mientras daba otro sorbo a su leche.
- Yo podría hacerla jamón - Sonrió Tae mientras revolvía la leche con su cuchillo.
- Yo creo que a veces se porta mal - Comentó JiYeon mientras le extendía una galleta a Mark - ¿Quieres? - Este solo asintió tomándola.
- Es una cerda kulz - Afirmó Hoseok luego de beberse toda la leche de una sola vez - ¡Ya háblanos Mark! - El nombrado negó sin despegar sus ojos de la pantalla.
- Luego de que terminé Peppa lo empujaré contra la puerta otra vez.
El maestro los miraba y sabía que luego de que terminara la caricatura de la maldita cochina su vida valdría kk. Así que tomo un papel y un lápiz y comenzó a escribir. Tomó su chaqueta y salió en silencio de la clase, pegó el papel en la puerta y se alejó. Atravesaba el pasillo como un super espía rodando y pegándose a la pared, hasta que la señora directora lo vio, y supo de inmediato lo que pasaba.
- ¡No puede irse! - Grito la anciana corriendo ancianamente hacia el. El muchacho la vio y salió corriendo mas rápido que el rasho makuin en dirección a la puerta - ¡VUELVA AQUÍ! ¡3312! ¡TENEMOS UN 3312! ¡MAESTRO A LA FUGA! - Habló por su comunicador.
- ¡LO SIENTO YA NO PUEDO! - Gritó saliendo del lugar tirándose frente a un taxi, voló sobre este y se metió en el asiento trasero - ¡RÁPIDO!
- ¡ESPERE NO SE VAYA! - La anciana lo alcanzó y trató de meterse al taxi - ¡LO NECESITAMOS!
- ¡ENCUENTRE A ALGUIEN MÁS! - Suplicaba mientras se sostenía de los bordes del taxi y empujaba con un pie la cara de la directora para que no entrase. En un arrebato de desesperación la pateó fuera y cerro la puerta - ¡ARRANQUE! ¡GOGOGOGO! - Y así fue como el taxi desapareció, llevándose al maestro que solo había durado una semana.
- ¡Espere! ¡Maestro Seleno! - Estiró su mano a la nada, pero ya era demasiado tarde - Rayos... - Murmuró la anciana levantándose y sacudiendo su ropa - Tendré que clavárselos a nueva... - Se achicó de hombros y volvió a entrar al lugar.
