El trio hechizado (NALU-FAIRY TAIL)

Capítulo 2

Avanzaban por el túnel de piedra apenas iluminado por el fuego de Natsu. El lugar apestaba debido a que el suelo estaba cubierto de cáscaras de banana y restos de frutas podridas​.

— ¡Con razón apesta! — dijo Lucy tapando su nariz con un pañuelo.

— ¿Porque hay tantas bananas? – dijo Happy tapando su naricita con sus patitas. Iba volando detrás de Lucy para evitar pararse en aquella asquerosa capa de basura.

Natsu iba delante de ambos iluminando el camino, tambaleándose mareado por el hedor. Lucy lo tomó del hombro y lo detuvo para entregarle otro pañuelo. Con ésto el chico pudo cubrir su sensible nariz  y se puso un poco mejor.

— Arigatou...oigan ¿Creen que aquí viva ese simio gigante de la película del otro día?...Hong Kong se llamaba, ¿Cierto?

— Se llamaba King Kong —respondio Lucy riendo divertida.

— Como sea...¿Crees que viva aquí? Si es así, quiero pelear contra​ él...

— Natsu, no creo que King Kong viva aquí. Es muy pequeño... – Respondió Happy negando con la cabeza.

— Ahh, tienes razón. Maldición, ¡Yo quería pelear contra él!

— Pero si King Kong no...

Lucy estuvo a punto de decirle que aquel personaje no era real, pero prefirió dejarlo así para no arruinarle la ilusión.

Siguieron avanzando hasta que el tunel desembocó en una nueva habitación. Más que una habitación, parecía una alcantarilla. Había agua en el suelo y las paredes ennegrecidas estaban cubiertas por grandes telarañas, cosa que hizo que Lucy se estremeciera. Avanzaron por el único pasillo que había a partir de esa habitación, y mientras caminaban por el se fueron dando cuenta que habian muchos pasillos más, como si se tratara de un laberinto.

— Lo que faltaba...es mejor que no nos separemos...y Natsu!...¡No toques nada! — le dijo Lucy en tono de suplica pero era demasiado tarde. Natsu estaba traveseando una enorme telaraña, picándola con su dedo, divertido por lo pegajosa que era.

— Mira Lucy, esto se pega. Con esto podría hacerle una buena broma a Gray...

El pelirrosa le prendió fuego con la punta de su dedo y como si se tratara de un pedazo de mecha, fue quemándose por completo hasta desaparecer. De inmediato cayeron del techo montones de pequeñas arañas sobre la cabeza se Lucy.

— ¡KYAAAA! — Gritó ella tratando de sacárselas de encima. Corrió hacia Natsu y se pegó a él, mientras pisoteaba las arañas pequeñas que cayeron al suelo. El pelirrosa soltó una carcajada.

— Son solo arañas pequeñas  — dijo divertido y con un dedo, sin que Lucy se diera cuenta golpeteó a una arañita que le caminaba por el cabello rubio a la chica.

— Natsu...

— ¡No te rías, eso no fue gracioso! — reclamó Lucy indignada.

— Debiste ver tu cara — dijo Natsu aún riendo y señalando hacia el rostro de Lucy con un dedo.

— Lucy...

— Eres un bobo, te dije que no tocaras nada...

— ¡¡¡CHICOS!!! —  gritó Happy al ver que no le hacían caso.

Ambos jóvenes miraron a Happy desconcertados. Happy se quedó en silencio y empezaron a escuchar un ruido tenue, como si algo corriera por las paredes y el piso mojado de la alcantarilla. Cada vez se acercaba más el sonido y entonces por el pasillo que habían dejado atrás, aparecieron una horda de arañas más grandes que las primeras, casi tan grandes como Happy. Soltando un grito de terror, Lucy empezó a correr dejando atrás a Natsu y Happy.