No Lo Desperdicies Mini/Novela - Lilo -

Capitulo 3

*Capítulo 3*

En cuanto Louis avanzó a la secundaria, las cosas volvieron a la normalidad, y justo antes de que el castaño cumpliera quince se embriagaron por primera vez en una fiesta de su familia, algo que contaron como un hecho de suprema importancia.

"Hola, chicos gay." El primo mayor de Liam, Daniel, rió desplomándose en una silla, con una cerveza en la mano, quitándose las botas. "No han hecho un intento con la cerveza todavía?"

Liam le sonrió a su primo, su expresión traviesa oscureciéndose. "Estamos esperando por un destapador, estúpido. Ninguno de los adultos está lo suficientemente borracho para no notarnos, todavía."

Dani negó y sonrió de forma condescendiente lo que hizo a Louis querer golpearle la nariz. "Ah, los viejitos están idos ya chicos. Hagan su movimiento."

Tomando su consejo, los dos chicos se levantaron, salieron de ahí, Liam riendo de Dani mientras el menor le preguntaba, "Hey, ¿Tu primo acaba de decir viejitos?"

Habiendo concluido hace semanas, en preparación, de que sólo tendrían una o dos oportunidades con las cervezas, agarraron tantas botellas y latas como pudieron, antes de salir corriendo al dormitorio que les habían asignado para la noche.

Metieron las botellas de cerveza bajo las almohadas, se sentaron lado a lado al pie de la cama, Louis removía las tapas con los dientes, entretenido con la expresión horrorizada del castaño, y tomaron el amargo líquido con regocijo.

"Argh, esto sabe a mierda." Murmuró Louis, sin derramar una gota, el conocimiento de sus efectos era bastante como para mantenerle bebiendo.

"Cállate y sé un hombre." Bromeó Liam, dando un codazo a su amigo y mientras levantaba el cuello de la botella de nuevo a sus labios, el menor deseaba que las mariposas en su estómago, por estar sentados tan cerca, desaparecieran.

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No era que todo girara alrededor de eso ahora. Liam seguía siendo el mismo Liam con el que había crecido.

Acostado tranquilamente y mirando las tablillas de madera de la cama de arriba, el ojiazul sonrió embriagadamente. "Hey Li..." dijo sin que se le entendiera. "Apuesto a que no puedes adivinar en qué enfermedad mental estoy pensando."

Se quedó dormido escuchando la risa apagada de su mejor amigo.

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Así como había resultado antes, Louis se adaptó bien a los amigos que Liam había hecho en la secundaria, pero como ellos dos aún pasaban la mayor parte del tiempo en casa solos, decidieron comer con todos los chicos la mayoría de los días.

"Entonces, Louis..." sonrió Niall, moviendo las cejas. "¿Con cuántas chicas te has besado?"

Con el sándwich a mitad de camino hacia su boca, el chico se congeló. Mirando alrededor de la mesa, finalmente mirando a Liam, quien tenía su cabeza inclinada con expresión pensativa. ¿La verdad? Louis nunca se había besado con una chica. No era que no hubiese tenido ofertas, las chicas le decían que era lindo todo el tiempo, sin mencionar aquella vez que Taylor había intentado meter su lengua en la boca.

Pero con eso como su único casi-beso, y sin excusas que quisiera decir en voz alta, Louis se quedó sentado, avergonzado e inseguro, mientras los amigos del castaño le miraban expectantes.

"Bueno yo..." suspiró. "Yo, um-"

"Sólo una chica." Le interrumpió Liam, lanzándole una extraña sonrisa antes de mirar alrededor y ver las poco impresionadas caras de los otros chicos. "Um, mi prima." Liam asintió, metiendo un poco de comida en su boca. "Sí, Lou salió con mi prima por un buen tiempo, así que... sólo una chica."