Fernando amaneció con dolor de cuello, era un dolor intenso, no había hecho ejercicio o se había lastimado el día anterior como para tener ese dolor, pensó que tal vez se había dormido chueco y por eso se había lastimado aunque no estaba muy convencido de esa respuesta. Tenía que irse a la escuela, podría haberle dicho a su madre que le dolía el cuello para faltar a clases pero no ese día, era la semana de exámenes finales en la escuela y no podía darse el lujo de faltar aunque apenas y pudiera mover un poco la cabeza.
Su madre le dio unos analgésicos para calmar el dolor y le saco una cita con el médico para después de clases, además que desde hace unos días Fernando se había quejado también de dolor de gastritis.
Fernando se fue a la escuela y como pudo presento sus exámenes, era apenas el primer día de una semana completa de evaluaciones. Saliendo de clases su madre lo llevo al médico.
En la consulta el medico les dijo que la gastritis y el dolor de cuello habían sido provocados por el estrés. Y que lo mejor sería que Fernando buscara una forma de relajarse. También le receto medicinas para el dolor de cuello y la gastritis.
Fernando regreso solo a su casa porque su madre tenía que ir al trabajo, el solía quedarse solo en casa después de la escuela hasta que su madre regresaba en la noche.
En el camino de regreso le conto por whatsapp a su mejor amiga Laura lo que le había dicho el médico, ya que en la escuela le había comentado del dolor de cuello y la gastritis, su amiga se preocupó por él y le encargo que le dijera que le había dicho el medico acerca de eso.
Fernando: El medico dice que es por estrés lo del dolor de cuello y gastritis y que si no me relajo puede empeorar y me puedo hacer una ulcera por la gastritis o parálisis temporal en el cuello, no sé qué hacer.
Laura: Pues eso no está nada bien, que te receto el doctor para relajarte?
F: pues nada, solo analgésicos para el dolor de cuello y antiácidos para la gastritis
L: deberías empezar a tomarte las cosas más con calma si no quieres empeorar
F: ya sé, pero sabes que así soy yo
L: yo sé una forma en la que podrías relajarte y dormir mejor
F: no quiero drogas muchas gracias, jajá
L: no tonto, una manera mejor y efectiva, sin drogas ni medicamentos
F: no creo en la meditación ni en las limpias o brujería
L: jajá, tampoco es nada de eso
F: entonces que es?
L: ven mañana a mi casa después de la escuela, yo preparare todo pero debes obedecer a todo lo que te diga sin replicar nada entendiste?
F: lo que sea por quitarme este dolor y el estrés
L: perfecto nos vemos mañana, cuídate
F: hasta mañana
Laura vivía con su hermana mayor, sus padres vivían en el pueblo en donde ambas crecieron, pero al cumplir 16 años su hermana se fue a vivir con su tía a la ciudad para estudiar el bachillerato y la universidad, cuando Laura cumplió 16 años sus padres también la mandaron a la universidad y para no darle molestias a su tía decidieron irse a vivir ambas a un departamento. Ahora su Hermana estaba terminando la universidad y haciendo sus prácticas profesionales por lo que se iba desde temprano y regresaba hasta media noche, dejando a Laura prácticamente sola todo el día.
Termino de hablar con Fernando y empezó a hacer una lista de las cosas que debía comprar para la terapia de relajación de su amigo. Era algo que su hermana había hecho con ella hacia algún tiempo cuando estaba triste o estresada y le había servido mucho, así que estaba segura que funcionaria también para su amigo.
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Antología ABDL
Teen FictionEste es un compilado de cuentos cortos del tema ABDL. Cada capítulo es una historia diferente. Disfrútenlas, agregaré nuevas historias muy seguido.