Mientras Que El Lobo No Está [HunHan]

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"Jugaremos en el bosque,
mientras que el lobo no está aquí, porque si el lobo aparece a todos nos comerá.
¿Lobo estas ahí?" 

1958, en algún lugar enmedio de la nada.

Sehun se encuentra en el asiento de la parte trasera de aquel auto, avanza a una velocidad constante por aquella carretera desierta, poco a poco la carretera se queda atrás dando paso a la floresta.

Cerca de quince minutos pasan, con el auto avanzando por el camino poco transitable que hace que todo se sacuda, y finalmente llegan a su destino.

Frente a ellos una imponente puerta de metal se alza, parece impenetrable. Con un mensaje en otro idioma que Sehun  reconoce como Latín, apesar de saber que lengua es, no es capaz de leerlo.

Un guardia se acerca, abre el pesado candado y con un chirrido estruendoso las puertas se abren dando paso al auto.

Los señores Oh bajan de auto y con señas de reproche obligan a que Sehun también lo haga.

Aquí es cuando un hombre alto, de buena apariencia física aparece frente a ellos.

Se presenta así mismo como el rector de aquel "instituto" y de manera cortes extiende la mano hacia el señor y la señora Oh , para despues extender su mano hasta Sehun que lo miró ceñudo, su madre nota esta actitud en su hijo y de manera disimulada, según ella, pellizca el antebrazo del niño que suelta un
<< ¡auch! >> en respuesta, de mala gana extiende su mano derecha y saluda a aquel hombre.

El edificio principal es grande, al estilo barroco, es impresionante pero Sehun puede apostar que de noche es algo aterrador.

Es viejo pero hermoso, cada cosa dentro de aquel lugar parece ser costosa, los cuatro caminan hacia la oficina del rector, hablando sobre el futuro de Sehun, a él poco le  importa.

Finalmente llegan a la oficina, es amplia, con sillones de piel color marrón, un enorme escritorio de caoba, cuadros de pintores que Sehun desconoce, una que otra reliquia en los estantes de madera, sus padres toman asiento y el hombre frente a ellos igual.

Fue cerca de una hora en la que el hombre les relato una historia sobre romanos y un niño que juro venganza, algo así recuerda Sehun.

- Solo hay una manera de entrar pero no de salir - concluye el hombre dándole una calada a su habano.

El señor Oh abre la cajuela del auto, saca la maleta de Sehun, se la entrega y con una apretón de manos cella el trato con YiFan.

La señora Oh observa a su hijo desde el asiento de copiloto del auto, una sonrisa triste y el auto parte, dejando a Sehun atrás.

El señor Wu guía a Sehun hasta las habitaciones.

- Aquí hay una serie de reglas, mientras decidas respetarlas, que es lo más inteligente, no habrá problemas. - Advierte el hombre mirando con suficiencia al niño que parece aburrido.

Abre la puerta dándole paso a Sehun y la cierra dejándolo solo.

El adolescente de 14 años observa todo.

Hay en total 12 camas, y la suya esta en la parte final, camina hasta allí, depositando sus pertenencias sobre la cama, rebusca en sus bolsillos, saca la cajetilla de cigarros, toma uno y lo enciende.

En ese momento la puerta se abre.