ღ Last Chance ( Harry Styles y tu ) ღ ST. Terminada

Capitulo 31: No te mereces a Harry.

- No mamá, no volveré por ahora – dijo por teléfono. – No, tampoco sé cuando volveré. No me importa lo que piensas, no lo hare. Si, si, dile a Jeremy “hola” de mi parte. Chau, mamá – corto secamente. - ¡La odio! – gritó.

- Creí que me odiabas a mi – dijo su padre entrando a la habitación con un café en mano.

- Es distinto – le dio la espalda y comenzó a escribir en una pequeña libretita palabras y frases sueltas.

“Confundida”

 

“Aburrida”

 

“Odio a mamá”

 

“¿Por qué todo me pasa a mi?”

- No es distinto. Es casi lo mismo – dijo su padre sentándose en su cama. – Somos tus padres te guste o no. Además hace unos días recuerdo que me amabas.

- Si, eso fue antes de que dos gorilas gigantes me raptaran en un avión privado y me trajeran a este lugar – pensó alguna otra palabra para su nueva amiga.

“Perdida”

 

“Sola”

- ¿Por cierto donde dijiste que estamos?

- Nunca lo dije, hija.

- Buen punto y sería muy considerado de tu parte decírmelo – le reclamo.

- No hasta que las cosas se calmen un poco – sentencio y _____ sabia que aunque llorara, maldijera, le pegara (en caso de poder hacerlo) o rogara, no lograría nada.

 

“Secuestrada (más o menos)”

Su padre hablaba del desastre de fiesta que había tenido hace (parecía una eternidad) tres días. La fiesta había terminado con que todos se enteraron de la farsa de _____ y Harry, y a nadie le hiso gracia. _____ intento por todos los medios, arreglar lo que habían dicho, pero ya nadie les creía. Después de aquella hermosa velada, los dos jóvenes se encontraron, a la mañana siguiente, dentro de una hermosa emboscada de paparazis y reporteros. Todos y cada uno de ellos los trataron de mentirosos. Horribles artículos salieron a la luz sin su permiso. El problema fue cuando al llegar de vuelta a la casa, la encontraron en malas, si se puede decir, condiciones. Las mismas supuestas fans habían roto varias ventanas de la casa y ya no existía más el patio. _____ Además quiso ser atropellada por una loca chica que grito algo como: “NO TE MERECES A HARRY”.

_____ no entendía por qué tanto odio. Sabía que lo que habían hecho no estaba para nada bien, pero no entendía por qué alguien intentaría matarla siquiera. Más tarde ese día lo descubrió. Varias revistas o páginas de chismes online, habían sacado grandes artículos en los que se leía cosas que ellos nunca hubiesen dicho y que nunca en su vida dijeron. Ella había sido la más atacada, naturalmente. A Harry la prensa lo amaba. “_____ Evans, modelo, cantante de segunda y quizás bailarina, dio su declaración después de la farsa de la que todos ya sabemos. Claramente la escuchamos decir que todo esto había sido por dinero y fama, y una relación con Harry era justo lo que ella buscaba. El joven Styles, fue completamente engañado por la bella chica, cayendo rendido a sus pies y dispuesto a hacer lo que ella quisiera. También fuentes cercanas a los chicos de One Direction, dijeron que Harry, después de la fiesta, le confesó su amor y esta vez le pidió de verdad que se casara con él, a lo que ella se rio y dijo que nunca se casaría con él, que solo lo había hecho por conveniencia, pero ahora tenía un mejor candidato (un millonario llamado Matt, quien ella siempre aseguro que era solo un amigo, con el que se la vio muy seguido).

Además…”

Por supuesto todo en ese artículo era mentira (por lo menos la parte del dinero, ya que ella si lo había pensado del lado de la fama, pero ella nunca lo usaría de tal manera). Y la última parte tampoco estaba tan lejos de la verdad… Harry, después de la fiesta, ya en su casa, se acerco hacia la cocina donde ella se encontraba jugando sin ningún interés con un vaso con agua.

- _____, yo lo… - comenzó él. Antes de que pudiera al menos terminar la frase, lo frenó con la mano. Ella podía sentir arrepentimiento en su voz, y no lo soportaba.

- No fue tu culpa, – dijo dándole un intento de sonrisa – en todo caso fue mía y lo sabes. Pero ya no hay nada que podamos hacer.

Harry pareció pensar seriamente en algo por unos segundos.

- Si podemos hacer algo – exclamó él. _____ levanto su mirada a Harry y vio un pequeño y casi irreconocible brillo en sus ojos.  

- ¿Qué? – pregunto al ver que él estaba esperando que ella preguntase.

Harry se arrodillo en el piso, frente a la silla donde ella estaba sentada. _____ ya sabía lo que le esperaba, a ambos.

- ____ Evans, ¿te casarías conmigo? – pregunto esperanzado y esta vez ____ pudo ver que los ojos de Harry brillaban aun más. – Esta vez enserio.

- Yo… - ____ no sabía que decir. Un par de lágrimas comenzaron a amenazar con salir de sus ojos. Dio un suspiro fuerte e intento decir algo más – Lo siento, pero…

- No me digas que no, te lo suplico – su voz ya estaba entrecortada. – No hay ninguna razón por la que me puedas decir que no. Ambos sabemos que nos amamos. Por favor no lo hagas más difícil de lo que ya es. Quizás así las cosas dejen de ser tan malas, y todo pueda volver a la normalidad…

- No es así, no es tan fácil… - _____ no entendía por qué no podía decir que si, y todos los problemas (por lo menos los más graves) terminaran entre ellos. Pero no podía. Quizás porque se imaginaba la historia distinta, o porque tenía miedo de hacerlo sufrir a Harry en un futuro, o incluso de salir ella lastimada.

- Si es fácil, y juntos vamos a salir adelante…

- No puedo, Harry – fue lo último que dijo antes de salir corriendo llorando. Justo en ese momento, su padre, enterado de todos los problemas que habían ocurrido a excepción de este último, había aparecido como por arte de magia. Dos hombres de seguridad trabajando para él, l “obligaron”, bajo ordenes estrictas, que empacara (otra vez). _____ no entendía las razones de su padre. Ella creía que escapar de los problemas era de cobarde y ella ya lo había hecho antes varias veces. Pero era imposible discutir con alguien como su papá. No tenía otra opción.

Su celular se lo había olvidado entre las corridas de armar rápido las valijas, por lo que no tenía ninguna especie de conexión con el mundo exterior. Además estaba en medio de un campo solitario, dentro de una mansión exageradamente gigante. Sumándole a esto, que su padre no le permitía usar el teléfono bajo ninguna circunstancia. Todo estaba mal.

- Te dejare dormir querida – dijo su padre sacándola de sus pensamientos. Tenía la sensación de que su padre se había quedado observándola mientras ella recordaba y reflexionaba, por lo que ella le pareció horas. – Buenas noches.

Buenas noches. No las tendría. Había algo que la estaba matando por dentro más que cualquier otra cosa. Como aquel extraño brillo de los ojos de Harry se había apagado, la última vez que lo vio antes de salir corriendo. Esa mirada. Como si todo se le viniera abajo. Confusión, enojo, desilusión, tristeza eran unas de los pocos sentimientos que pasaban por la cabeza de Harry en ese momento. Y por supuesto, un corazón roto.

El cual ella había roto sin piedad…

No se merecía a Harry