Un dia duro, como otro normal

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Era de mañana a las 8 am , él despertador de una habitación llena de dibujos con paredes azules y en la cama una chica de cabello castaño con ojos azules , se disponía a sonar su alarma. La chica se dispuso a apagarlo para después levantarse e estirarse con vagancia. Se vistio y desayuno apresurada , la chica se despido de su madre con un beso en la mejilla y corriendo fue a la escuela.
Cuando llego allí la chica se sentó en su silla en él salón y suspiro.Esperaba a que la campana de clases sonara. Unas chicas se le acercaron , riéndose a su lado. Entonces nuestra protagonista susurro entre si.

- que chicas mas estupidas-

Empezó la primera clase y solo atendió al profesor , era buena estudiante y siempre aprobaba todo. Pero su problema era que esta completamente sola. A la hora de salir al recreo se junto con su primo y hablaron sentados en un banco.

-Ana estas bien?-le pregunto él chico.

-si, kai estoy perfectamente-

Ana le sonrió a kai timidamente , después de eso charlaron hasta acabarse él recreo. Antes de llegar a clase a Ana la empujaron , cayendo esta al suelo.
-auch!- dijo Ana, mientras escuchaba a las chicas llendose riéndose.
Ana después de eso sin tomarlo importancia volvió a clase y atendió. Después de terminar él día , volvió a su casa y nada mas entrar se encontró una agradable sorpresa.

El diario de una marginadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora