Cartas Pérdidas

LA VIDA ES EXTRAÑA

Esos días que pasamos
Este tiempo sin hablar
Pasan días pasan años
Y no te puedo olvidar

Como cuando nos dijimos
"Yo no te podré dejar"
Pero al final partimos
Cada uno a su lugar

Simplemente no te entiendo
Prometiste regresar
Y ahora estás riendo
Yo fui fácil de cambiar

Simplemente no te entiendo
Prometiste regresar
Y ahora estás riendo
No te pude esperar

Tus besos y tus abrazos
Que nunca podré olvidar
Me quede brazos cruzados
Luego me puse a llorar

Bastante tiempo ha pasado, desde la última vez que hablamos, desde la última vez que reímos, desde la última vez que nos amamos; creo que ni recuerdas todo el tiempo que pasamos, ni todo el tiempo que esperamos.

Cada vez que pienso en ti , algo en mi corazón recuerda los momentos felices, antes que lo destruyeras en mil pedazos...

La primera vez que hablamos, éramos un par de niños, que sin saberlo, a un camino habían partido, la primera vez que te vi pensé que eras una niña un poco rara ya que tu foto de perfil parecía de una niña desanimada, pero me arriesgué y me hablaste, sin pensarlo te escribí, y no me di cuenta que ese era el inicio de mi fin.

Poco a poco nos fuimos enamorando, hablábamos todos los días como si el tiempo no existiera.

Me enseñaste a tomar los más grandes riegos, y también a qué horas se le da culto a señor de los vientos verdes.

Estuve contigo en momentos críticos, en los cuales solo querías llorar un poquito.

Y a veces "La vida es extraña" y pasábamos riendo de puras pavadas, cada vez que te veía aunque fuera en un snap, sabia que eras alguien de la que no me iba a olvidar.

Las cosas iban un poco mal, por alguna razón no me querías ni hablar, 420 mensajes después ya te querías marchar.

Intenté e intente, recuperarte a toda costa, pero ni con ayuda de Baldor podía resolver este problema.

El tiempo se acabo, la racha murió y tú ya no creías en nuestro amor.

Me dijiste que era tiempo de cambiar nuestro camino, pero la verdad es que tú te fuiste con el amigo del vecino.

Me rompiste el corazón en mil y un pedazos, perdidos en el amor, mientras tú feliz reías, yo en mi cama todas las noches escribía poesía.

Bastante tiempo ha pasado desde aquel difícil día, en el que te vi con otro que ni caso te hacía.

Ahora no me quieres hablar, desaparecí para ti, como si está historia nunca hubiera pasado y sea obra de mi cabeza, perdida en ti.

Pero yo todavía te quiero, aunque me hayas hecho todo eso, en mis recuerdos siempre estás, pero solo los días felices, son los que quiero recordar ya que tristemente no se podrán retomar, así que persigue a tu delantero, que no se te vaya a escapar.

Y para terminar solo quiero decirte que si llegas a leer esto, que no olvides que después de todo esto me sigues debiendo mi beso.