6- Que comience la Guerra.

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Temari se encuentra sobre la cama inconsciente, mientras que Kakuzu junto a Nagato le sanan la pierna. Naruto tiene la mano tomada de la rubia mientras le hace suavemente cariño.

Hinata e Itachi están sentados en el living esperamdo a que salgan los chicos para darles noticias de Temari.

El pelinegro tiene la mano tomada de la chica y en ese momento le suena el teléfono a la peliazul.

— Debe ser mi hermano — Dice Itachi serio, la chica asiente y contesta.

— ¡Hinata! — Grita Sasuke —. ¿Estás bien?

— Si cariño ¿Por qué no lo estaría? — Dice la chica fingiendo estar animada.

— Por nada ¿Mañana que harás?

— Debo trabajar en la mañana pero tengo la tarde libre.

— Podríamos juntarnos a pasar el rato — Dice animado el pelinegro.

— No lo se Sasuke, no quiero molestarte, debes tener mucho trabajo.

— Tranquila linda. Para ti siempre tendré tiempo, si quieres invita a Temari y salimos los cuatro por...

— No será posible, Temari fue a visitar a sus hermanos — Miente la peliazul —. Mi turno termina a la una. Si puedes ve a buscarme y hacemos algo.

— Si claro. Ten cuidado — Dice Sasuke y luego cuelga el teléfono. Hinata se ríe a carcajadas.

— Al parecer tomó en cuenta mi amenaza — Hinata pone su cabeza sobre el hombro del pelinegro —. ¿Esto acabará pronto amigo?

— ¿Quieres la verdad o que te mienta bonita? — Dice el pelinegro entristecido.

— La verdad.

— Esto seguirá hasta que uno de los dos bandos caiga.

— Lo se amigo — Dice la peliazul sonriendo con tristeza —. Ya el dinero ha pasado a segundo plano y eso no me gusta. Lo que me motiva es el dinero no tener que matar a alguien. Esto ya no tiene sentido para mí.

— Lo sé pero debemos hacer lo que sea para sobrevivir. Las protegeré lo más que pueda — Dice el pelinegro acariciando el cabello de Hinata.

— Lo sé. Te amo mucho amigo  —Dice Hinata y le sonríe dulcemente.

(...)

— ¿Cómo está? — Pregunta la peliazul al ver a su amiga dormir.

— Bien, no debe esforzarse por un tiempo. En lo posible no debe hacer que la herida se abra. No somos doctores e hicimos lo que pudimos — Dice Kakuzu serio.

— Dejémosla descansar. Nosotros también debemos dormir — Dice Naruto.

Al día siguiente.

— No te vayas mi amor — Dice el rubio agarrando a Hinata por la cintura.

— Debo trabajar cariño, nos vemos esta noche — Hinata besa al rubio.

Se pone de pie mientras se pone ropa rápidamente y observa al chico unos segundos con una sonrisa.

— ¿Estás pensando en quedarte? — Dice el chico al notar que Hinata lo observa.

— No puedo perder este trabajo. Es mi mejor fachada.

— Lo entiendo. Te amo amor, cuídate — Dice el rubio sonriendo y volviendo a acomodarse en la cama.

La peliazul sale de la habitación y se queda de pie unos segundos con sus ojos cerrados hasta que decide ir a la habitación en la que está su rubia amiga.

Enamoradas de un oficialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora