Uno

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—Marina.—Me llamó mi mamá.—Mañana me voy a ir a trabajar temprano, ábreles a los del censo, por fa.

Levanté las ambas cejas, ya que no sabía levantar sólo una y suspiré con paja.

—Mamá, que flojera.—Hice un puchero.—¿Y si hago como que no hay nadie en la casa? Demás que no se dan cuenta.

—Hay que pagar una multa si no les abres.—Se metió mi papá mirándome con el ceño fruncido.—Ni cagando pago, así que te levantas tempranito y les abres la puerta.

Asentí rendida.

Yo quería disfrutar de mi semana libre gracias al censo, pero no, tenía que abrirle a los cencistas que pasarían por mi casa.

Censo culiao.

—Me voy a ir a acostar.—Avisé mirando mi celular. Me había llegado un mensaje de mi mejor amigo.

—¿Tan temprano?—Preguntó mi mamá mirando la hora en la tele.—Son recién las nueve.

—Tengo sueño.—Me encogí de hombros.—Hasta mañana.

Mi mamá asintió y me dió un beso en la mejilla.

—Hasta mañana.—Murmuró mi papá con la boca llena.

—Cerdo.—Me reí y subí corriendo la escalera hasta mi pieza.

Entré y me tiré en mi cama mientras desbloqueaba el celular.

Abrí WhatsApp y miré el chat de mi mejor amigo.

Nacho-Man💞:
En línea..

Oye, me llamó la Tamy llorando, no cacho🤔  llámala hueón.
21:12

Puta oh, ¿No te dijo por qué?
21:14

No po, sólo me dijo "Nacho te necesito" le largó a llorar y me corto.
21:15

Anda a verla po, tonto culiao.
21:16

Ya voy casi llegando, ahueoná.
21:16

Dale, me contai que onda..
21:17

Bloqueé el celular y lo puse en mi velador.

Mañana me tendría que despertar temprano para abrirle a los censistas.

Censo y la conchetumare.

(...)

—¡Marina son las ocho y media!

Abrí un ojo y ví a mi mamá con cara de enojada parada en la puerta de mi pieza.

—¿Las ocho, en serio?—Pregunté y cerré el ojo.—Es muy temprano, necesito dormir.

—Levántate ahora mismo si no quieres que te cacheteé.—Advirtió.—Estay toda indecente, tení que arreglarte un poco.

Abrí los ojos con paja y la miré.

—¿Arreglarme para qué? ¡Te apuesto que va a venir algún viejito y ni me va a pescar!

Negó y se rió.

—Siempre hay que dar una buena impresión, además en una de esas podí encontrar al amor de tu vida con el censo po.—Sonrió.—Ya sabí como nos conocimos con tu papá.

Censista culiaoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora