Hey.

Tú .

¿Seguro que te quiero?

Al momento de verte logro recordar el por qué me he enamorado tan perdidamente de ti.

Me es imposible no perderme en tu mirada, no puedo dejar de pensar en ti y cuando estamos juntos no puedo verte sin pensar que soy el tipo más afortunado del mundo por estar contigo. No puedo dejar de escribirte cosas sin sentido como esta, cosas tan repetitivas, todo me recuerda a ti, en todos lados estas maldita sea, en las palabras que escribo, en la manera que hablo, en los libros que leo estas tú, en los lugares que frecuento siempre estás tú. Te he querido olvidar pero me resulta imposible porque en cada cosa que hago estas ahí. Me rehusó a conocer personas nuevas, cada vez que conozco a alguien me resulta aburrido, no logro estar bien si no es contigo, te quiero tanto que me odio por lo mismo, intentando olvidarte me olvide de mí mismo. Deje de escribir, deje de escuchar música, deje de ser yo. Eres todo lo que quiero, mujer. Bendita sea la hora, el lugar y el momento en el que te conocí. Bendito sea el día en el que te bese por primera vez y supe que todo iba a cambiar en mí. En el momento en el que escribo esto estoy pensando en ti y en todos los momentos en que hemos pasado juntos, esto es una pequeña parte de todo lo que yo siento por ti. ¿Cómo es que pude enamorarme tan perdidamente de ti?

Al decirte que te quiero estoy mintiendo, no es tan fácil describir esto que siento ya que va más allá de las palabras, mas allá de todo lo imaginado. De ser fácil describir lo que yo por ti siento, de ser sencillo aquello seria como cualquier otro idiota que esta enamorado de ti. De ser fácil sería igual que todos aquellos niños que dicen quererte por tu cuerpo, de aquellos idiotas que solamente están enamorados del aroma de tu perfume. De aquellos idiotas que no saben lo que quieren de su vida. Y no, no te puedo decir que te amo, no puede ser tan fácil decirte aquellas palabras tan vacías. Y no, no es que no esté seguro de que te amo, estoy seguro que tú eres lo que yo más he llegado a amar en esta corta vida que tengo.

¿Por qué te tuve que encontrar?

Entre todo el maldito desorden de mi vida, llegas tú. Llegas sin que nada te importe, llegas y creas otro maldito desorden más. No me dejas escoger, te quedas y me haces perder la poca razón que tenía. Miles de ideas rondan por mi cabeza, pero entre todas esas ideas y conflictos emocionales conmigo mismo, siempre estás ahí. Maldita sea ¿Qué demonios me has hecho? Prefiero dejar todo a lado, cualquier problema, cualquier necesidad u obligación, cualquier cosa importante que debo de hacer la dejo de lado por estar contigo. De repente llegaste y no tengo más opción que pensar en ti. No logro disfrutar nada si no estoy contigo. Todo se me hace aburrido, me resulta difícil entablar una conversación con alguien que no seas tú. Rondas todo el tiempo dentro de mis pensamientos que lo único que hago es hablarles de ti a todos. ¿Qué tanto me debo de querer? Te odio, realmente hay dios en los que lamento el haberte conocido. Aborrezco el día en el que te vi por primera vez y aquella sonrisa que me hizo perderla razón: la odio. Lo que más puedo odiar es a este idiota que pensó que enamorarse de ti podía ser una buena idea.

Te amo como no tienes idea, y te odio por lo mismo.

¿Por qué no te vas?

¿Por qué no me dejas y te vas muy lejos de mí? Tú no pierdes nada, en cambio ganarías muchas más cosas. Dejarías atrás a un tonto, neurótico e insoportable niño como lo soy yo. Hazme un favor, solamente te pido que te vayas de mi vida, te pido que no vuelvas y que encuentres alguna razón para que no te queden ganas de regresar nunca jamás. Vete, sin decir nada, toma lo que te pertenece y emprende tu ida. No voltees atrás, no pienses en mí, por favor. Cambia esa manera tan particular tuya de caminar, aquella costumbre de moverte al no estar haciendo nada. Aléjate lo más posible de mí, mándame a la mierda si es posible. Hazlo por pura consideración. Aléjame de ti.