Facetime (N.H)

Primer capítulo

" Vídeo llamada entrando..."

      "Atender" "Rechazar"

- Hola, amor - Suspiró entre sus labios. Se veía cansado. -

- Hey, luces exhausto, ¿Estás bien? -

- Sí, sí. Es solo que el vuelo fue muy largo y estoy algo cansado, es todo. No te preocupes. - Me aseguró mientras sus parpados se cerraban poco a poco, pero él luchaba por mantenerse despierto. -

- Bien, tal vez deberíamos dejar esto para mañana. Tienes que descansar. Nos- -

- De ninguna manera. Estoy bien, ¿Lo ves? - Me interrumpió, enderezando su espalda de un salto en el sillón. -

No pude evitar sonreír.

- Estás loco, ¿lo sabías? - Murmuré con mi puño vagamente entre cerrado sobre mis labios. -

- Definitivamente, pero no viaje once horas en un avión solo para verte el rostro por dos segundos. - Lentamente se deslizó una sencilla sonrisa sobre su comisura izquierda al final de la última palabra. - ¿Y qué hay de ti?, ¿Cómo ha sido tu día? - Preguntó mientras se reacomodaba en el sillón. -

- Lo mismo de siempre; aburrido, agotador y ordinario. Lo más emocionante que me paso hoy fue chocarme con mi jefa y que me derramara su café encima. Pero eso no es lo mejor, aun estoy esperando no tener una quemadura de tercer grado en el pecho. -

La única respuesta que obtuve fue un resoplido seguido de una sonrisa.

- Aún no entiendo por qué sigues en ese empleo. Lo odias. - Dijo, mirándome tan detenidamente que casi podía sentir que sus ojos azules atravesaban la pantalla y se escabullían en cada rincón de mi rostro como si estuviese aquí, frente a mí. -

- Porque si no trabajo, no podría mantener este hermoso departamento. Además no todos podemos vivir de lo que amamos como tú. - Dije, mirándolo o bueno, más bien a la cámara. -

- Auh! - Se quejó, llevando una de sus manos hacia su pecho y dejándola sobre su corazón. - detecto un poco de envidia ahí. - Bromeó, frunciendo su ceño como si estuviese ofendido o al menos eso intento demostrar. -

Solo arqueé mis cejas, mirándolo significativamente mientras contenía los inicios de una sonrisa.

Él hizo una mueca. - Idiota - Murmuré mientras desviaba mi mirada hacia otro lado. -

- Quisiera poder atravesar esta pantalla y besarte ahora mismo. - Al decirlo, sus ojos se entristecieron. -

- Niall - Dije en voz baja, aun sin mirarlo. Esta distancia me dolía tanto como a él. -

- Estás tan bonita. - Su voz sonó aun más afectada por sus sentimientos. -

- Creo que ya debería irme. - Dije, cambiando abruptamente de tema. - Mañana tengo que levantarme a las cinco y supongo que tu también tienes cosas que hacer. - Mi voz sonó algo severa esta vez, aunque no tuve la intensión de que fuese así. -

No quería que nos despidiéramos así, pero no sabía si podría soportar otro "Te extraño" sin palabras, otro roce de su mano que no puedo alcanzar u otra noche fría en la que quiero abrazarlo y escuchar el latido de su corazón.

- Está bien, como quieras. - Sus cejas se arquearon levemente al decirlo. Parecía sorprendido y contrariado a la vez. -

- Por favor, no te enfades ¿sí? - Le pedí, mirándolo de nuevo. - Es solo que también tuve un día difícil y estoy cansada, pero hablamos mañana, te lo prometo. - Le expliqué, esperando que todo estuviera bien. -

- Si, si, está bien. - Asintió cansadamente -

- ¿Estás seguro? - Dudé -

- Si, no hay problema. - Volvió a asegurar. - No te preocupes, ve a la cama. Creo que yo también iré en un rato; aunque este sofá tampoco luce nada mal. - Dijo con una expresión más animada en su rostro mientras observaba y jugaba con el almohadón que había estado apartado a un costado en el sofá. -

Suspiré una vez más mientras él no me veía y pensé en ¿Qué tan diferente serian las cosas si estuviésemos juntos la mitad del tiempo que estamos separados?

- Bueno, creo que ya debería dejarte ir. - Dijo Niall, curvando una ligera sonrisa al final mientras volvía a verme. -

Yo solo pude hacer una mueca, no sabía que mas decir.

- Duerme bien, nos vemos. - Dijo tenuemente, pero la expresión de sus ojos se había vuelto insegura, como si le faltara algo por decir. -

- Si, igual tú. - Le respondí casi sin pensarlo. -

Él se quedo viéndome a los ojos por unos segundos, solo mirándome, y luego terminó la vídeollamada antes de que pudiera decirle algo más.

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Hola, ¿Cómo están? Espero que les guste el capítulo porque en realidad este es el borrador de una historia que se me ocurrió hoy y lo escribí con lo primero que se me venia a la mente. Pero si les interesa seguir leyéndola, avísenme en los comentarios o con un simple voto basta. Todas las opiniones, consejos o sugerencias son bienvenidas/os siempre que sean con buena onda y respeto.

Nos vemos. Buenas noches.