último aliento.

Último aliento.

De seguro ya has escuchado la historia y si no es así, déjame que te la cuente...

Hace muchos años, más de los que tienes tú y que tendrás en esta vida. Cuando la electricidad era solo antorchas en los caminos y lámparas de aceite en las casa; cuando los autos no eran más que carretas jaladas por caballos. En un reino ya inexistente gobernado por sus reyes teniendo a su pueblo en desigualdad; los afortunados tenían y desperdiciaban mientras los desafortunados luchaban por una hogaza de pan añejo, por un poco de agua limpia.

Lo que te contare ocurrió en esa parte del pueblo, para ser más específicos cerca del panteón del pueblo se encontraba una casa pequeña de barro y pasto seco, donde vivían una mujer y sus tres hijos... Garamaru era el mayor seguido por Gatenmaru ambos hijos del mismo padre, pero cuando su padre murió siendo ellos muy pequeños su hermosa madre tuvo que trabajar para alimentarlos.

Un día cuando el crepúsculo moría y ella regresaba a su hogar descubrió que era robada. Corrió aterrada por la seguridad de sus hijos; mas solo encontró a los bandidos que al verla hermosa no dudaron en abusar de ella, con la cara incrustada en el suelo mientras era violada por entre las rendijas del suelo logro ver con alivio a sus hijos escondidos. Casi al alba los bandidos satisfechos se fueron, la madre se limpió y arreglo el cabello dejando salir su sollozo por tan repugnante acontecimiento, sin embargo no mostraría a sus pequeños tan deplorable apariencia... seco sus ojos y se dirigió a sus hijos que con miedo la abrazaron y lloraron desconsolados. Los meses pasaron y su barriga comenzó a crecer. En el pueblo todos sabían cómo había sido concebida esa criatura, no obstante ella no escucho jamás las voces que le decían matarlo; así nació el tercero de sus hijos, Inu Yasha. Pero el rencor por el recuerdo en la mente de sus hermanos solo hizo que cuando la madre no estuviera... sus hermanos abusaran de él, golpeándolo o quitándole la comida "bastardo, bastardo" le gritaban, solo una vez pregunto qué era eso y como única respuesta tuvo las lágrimas de su amada madre. No falto el día que por las lenguas de sus hermanos supo de su origen, ni que después le restregaran día a día la desgracia que él significo para su madre haciendo que sintiera que no merecía el amor que recibía de ella, de quien heredo sus ojos castaños y cabello negro, como así también su buen corazón. A diferencia de sus hermanos que llenos de codicia y holgazanes trataban de cautivar a alguna noble para salir de la pobreza en la que vivían, siendo Inu Yasha el único que trabajaba al su madre enfermar.

Los abusos de sus hermanos hacia él seguían, pero por su madre los soportaba, no así los de los del pueblo donde a más de uno lo dejaba inconsciente a golpes de puño, sobre todo en las peleas clandestinas una de sus fuente de ingresos. Teniendo 15 años, solo se metía en peleas que creía podía ganar, ese día era unas de esas y aunque gano no se fue del todo limpio. Luego de luchar se fue hasta el bosque, había aprendido que quedarse cerca solo significaba ser robado e ir a casa directamente... un chico que él conocía fue seguido hasta su hogar, robado y matado al su familia querer intervenir.

Subido a un árbol tratando de descansar antes de irse a casa, comenzó a escuchar la voz suave y varonil de alguien tararear "¿Qué es eso?" se preguntó tratando de verlo. El tarareo se volvió trova.

–... La noche expone la dura realidad

Que me mata cada vez más,

Sumergiéndome en la oscuridad de aquel recuerdo fugas,

La sonrisa del bufón oculta su lágrima,

Otra vez vuelvo a gritar el nombre que he dejado atrás,