First Dates

193 7 4
                                    


Naruto se había apuntado a ver qué caía. El chaval no había tenido mucha suerte en el amor en su vida, y un día mientras hacía zapping dio con el programa First Dates en la tele. Pensó que sería una buena oportunidad para encontrar el amor, así que se apuntó. La producción le aceptó de inmediato, pensando en el share que iban a conseguir con tal personajillo.

Sasuke se apuntó por venganza. Su novia le había dejado hacía nada, alegando que Sasuke era gay y que no quería vivir una mentira. Al chaval nunca le había gustado del todo la chavala, pero las mujeres en general se le hacían pesadas, así que dentro de lo que cabe no estaba mal. Pero vió la oportunidad perfecta para hacerle pagar, y por eso hizo el vídeo casting más dramático y trágico que pudo. La producción le aceptó de inmediato, pensando en el share que iban a conseguir juntando al personajillo de antes con este personaje.

El día de la cita, Naruto estaba comprensiblemente nervioso. Había literalmente soñado con esto. Conocería a una chica guapa, o quizá a un chico divertido. No sabía nada de la otra persona, pero así era incluso mejor. Cuando entró, Carlos Sobera le saludó y preguntó algunas cosillas. Naruto ni siquiera sabía qué había preguntado, y mucho menos lo que respondió, pero la verdad es que le daba igual. Carlos le acompañó hasta la mesa y le dejó esperando a su puede que alma gemela.

Sasuke se arrepentía cada día más de haber aceptado ir al estúpido programa. Había formas mejores de venganza que no incluían tener que ir a la tele para hacer el ridículo. En fin. Quizá hacía un amigo o algo, aunque lo dudaba. El tipo de gente que iba a este programa no era el tipo de gente con la que querría relacionarse. Además, había pedido explícitamente hombres, así que ni siquiera podía conseguir una nueva novia. Carlos Sobera le saludó, como hacía con todos, y tras unas breves preguntas que Sasuke respondió lo más efusivamente posible, lo llevó hasta la mesa donde estaba su pareja de la noche.

En la mesa ya estaba un chico como de su edad, rubio y prácticamente vibrando. Parecía que tenía un consolador en el culo. Joder, a que tiene un consolador en el culo, pensó Sasuke. Era un programa de telebasura al que iba todo gente extraña, así que imposible no era.
Nada más verle, Naruto se levantó casi de un salto y fue a darle dos besos, pero Sasuke se adelantó al mediometro que tenía delante y plantó la mano entre los dos. Naruto lo miró confundido unos momentos antes de darle la mano. Sasuke le sacaba como una cabeza.

Ambos tuvieron la oportunidad de ver en condiciones al contrario por primera vez. Sasuke se fijó en que iba en chándal, y ni siquiera uno decente, pero lo primero que vió Naruto era que el chaval que le había tocado era guapo. Muy guapo. Sí, era claramente emo, con el flequillo en chuleta que le tapaba un ojo y toda la ropa de negro, y sí, su intento inicial de contacto físico se había ofuscado, pero eso no le desanimaba. Estaba decidido a seducir a este mozo.

—Bueno, yo soy Naruto. Cuéntame algo sobre ti. ¿Qué quieres sacar de aquí? —preguntó Naruto, intentando romper el hielo una vez se habían sentado.

—Venganza —respondió misteriosamente el chaval.

—Aah, qué guay. Yo quiero encontrar a alguien con quien estar y hacer... cosas de mayores.

—Madre mía pero qué básico.

—¿Eh?

—Vamos a ver eso es lo que busca todo el mundo aquí sé un poco más original.

—Es que... ¿Pensaba que era un programa de citas?

—Mira yo así no puedo. Que yo entiendo que el percal no sea el mejor pero me podrían haber traído a alguien decente —se quejó Sasuke, girando la cabeza bruscamente para apartarse el flequillo de la cara.

First DatesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora