...
- ¿Eh? ¿Dónde estoy?-
- ¡Alicia! ¡Alicia!-
- ¿Quien es el que habla?-
- Pero que tonta, mira hacia abajo, chiquilla.-
- Entonces... ¿Se dirige a mí? Oh pero si usted es...-
- ¡No hay tiempo Alicia! Rápido, hay que irnos.-
Es un lindo conejo blanco... y me está hablando a mí.
¿Acaso comer tanto chocolate me ha afectado como me lo advirtió madre?
- ¿Ir nos a donde señor conejo?-
- Shh, tu sígueme... -
- ¡Pero! yo no hablo con extraños, así me lo han inculcado.-
Paro de correr, y volvió a verme de frente, que curioso conejo blanco.
- Querida Alicia, yo no soy ningún extraño para ti-
Bah, el conejo blanco me sigue diciendo Alicia, pero yo me llamo Alexia... es muy tierno, no quiero espantarlo, mejor dejare que me siga diciendo así.
- Un momento, ¿¡y el conejo blanco!? ¿A dónde se ha ido?-
- ¡Rápido Alicia, por aquí! que se nos acaba el tiempo.-
En qué momento se alejo tanto, tengo que seguirlo... debo preguntarle donde estoy, que es lo que hago yo aquí.
-¡Señor conejo! ¡Espéreme!-
Tengo que seguirlo, tengo que seguirlo... ¡ouch! Choque con él, ¿Por qué se ha detenido?
- Ay no... Alicia, se nos ha acabado el tiempo... ya tienes que despertar...-
- ¿Qué dice señor conejo?-
- Despierta...-
¿Despertar? ¿Me está tomando el pelo?
- Al... Alexia.-
- Alexia... cariño, despierta.-
- ¿Madre?-
- Te has quedado dormida durante todo el viaje.-
- ¿Has visto a donde se metió el conejo blanco?-
- Vamos, ya hemos llegado, es hora de despertar.-
- ¿Despertar?... ah he estado soñando solamente...-
- Si, solo era un sueño Alexia querida.-
- ¿Alexia? Madre... ¿Mi nombre no es Alicia?-
- Que estas diciendo cariño, tu siempre has sido Alexia y siempre lo serás, ¿De acuerdo?-
- De acuerdo... madre.-
...