Parte 2

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Narradora

Seungcheol giró su rostro en dirección a Jeonghan y lo miró un poco asustado por sus palabras, tapó rápidamente su boca con su mano izquierda, la cual tenía libre y se puso un poco pálido. Pasaron unos segundos mirándose el uno al otro y Jeonghan mantenía una sonrisa tan radiante que Seungcheol pensó que era la sonrisa más hermosa del mundo, y entonces se dio cuenta de que aún seguían en silencio.

-Jeonghan... Dije Jeonghan – Dijo disimulando que su anterior comentario nunca existió, la sonrisa y la mirada de este se apagaron de golpe, ¿qué estaba pensando? ¿acaso imaginó ese comentario? (Claro, no sería la primera vez que le pasaba), pero esta vez estaba seguro de haberlo escuchado, por eso se atrevió a preguntar - Vamos, se hace tarde – dijo Cheol y abrió la puerta del copiloto de su automóvil para que Jeonghan entrará.

Al entrar al vehículo, se sintió un silencio algo incomodo, Jeonghan tenía ganas de llorar porque por un momento tuvo esperanza, tuvo fe de poder hacer que Seungcheol se fijará o se enamorará de él, pero algo dentro de él ya no podía con tanto dolor, estaba empezando a pensar que sería mejor rendirse.

-Ya llegamos... – Se escuchó la voz de Cheol y Jeonghan tuvo que despertar de sus pensamientos, no habían hablado en todo el trayecto a su casa y es que tampoco estaba muy lejos de la cafetería a la cual habían ido – Te veo mañana... – Dijo Seungcheol una vez más para llamar la atención del pelilargo que permanecía en silencio, aún no entendía lo que le pasaba a su amigo, se estaba empezando a preocupar y tomó el valor para tocar su hombro de una forma delicada para no asustarlo – ¿Jeonghan?... – soltó casi como un suspiro.

Por su parte, Jeonghan era tan solo un humano con los pensamientos revueltos, con las manos apretadas en su regazo y aún no podía entender como había llegado a eso, sentía sus mejillas húmedas lo sabía, había empezado a llorar, no quería hacerlo frente de él, no frente a la persona que más amaba en este planeta, pero ya no podía más con sus sentimientos, sentía como algo estaba apretando fuerte su pecho y en un susurro dijo – Te amo...- Apretó los ojos al igual que sus labios. Después de haberlo dicho no pudo parar de repetirlo – Te amo, te amo, te amo. Por Dios, te amo tanto que ya no se qué hacer... – Ahora ya no había marcha atrás, tenía el rostro tapado con sus manos, no quería mirarlo directo a los ojos porque sabía que si lo hacía no resistiría las ganas de besarlo y abrazarlo tan fuerte que lo lastimaría – Seungcheol ...- susurró su nombre entre lágrimas cayendo por sus mejillas – ya no puedo con esto...- se quito lentamente las manos del rostro y su mirada quedó clavada en algún lugar frente a él.

-Je-Jeonghan...- Tartamudeó un poco, ¿que si estaba sorprendido por lo que acababa de escuchar? Claro que lo estaba, no todos los días se te declara tu mejor amigo con tanta tristeza y dolor en sus palabras. La realidad era que no sabía que decir a esa confesión; por supuesto que muchas chicas y algunos chicos se había confesado antes, pero ahora era distinto (muy distinto) a las veces anteriores, esta vez era alguien que en verdad apreciaba y quería demasiado como para lastimarlo. No podía compararlo con el amor que tenía por sus padres porque a él lo quería de una forma especial, él era el baúl de secretos, era su alma gemela (como amigo, eso pensaba), a él no podía ocultarle nada (aunque quisiera), quería protegerlo de todo y todos.

Seungcheol lo miró detenidamente por unos segundos y mientras lo observaba, se dio cuenta de algunas cosas que nunca antes había notado en Jeonghan. Su piel tan blanca como la leche y suave casi como la seda, sus labios (que en este momento los tenia como un tierno puchero hipando por su llanto) eran de un ligero tono rosa, el cual era muy hermoso a sus ojos.
Jeonghan cerró los ojos por un momento, no esperaba respuesta, puesto que se había declarado en un ataque de nervios y recién se estaba dando cuenta de lo que pasaba, empezó a ponerse más rojo por el acercamiento del rostro de castaño, Seungcheol se detuvo justo antes de tocar sus labios, alcanzando así a tocar nariz con nariz, sintiendo sus respiraciones entrecortadas, el castaño sonrió de lado viendo como Jeonghan intentaba retener su respiración ahora que lo tenia tan cerca, y en un leve pestañeo por parte del pelilargo aprovechó y juntó sus labios con los suyos, sintiendo al instante una sensación agradable y dulce. Al principio, Jeonghan creyó estar soñando, por que si, desde que se dio cuenta de sus sentimientos por su mejor amigo imaginó como sería su primer beso con él, aunque nunca se hiciera realidad. Un agudo golpeteo en su pecho de nuevo, pero esta vez era diferente a las demás, no se sentía mal como cuando veía a Seungcheol con alguna nueva novia o conquista.

El beso no duró mas de 5 segundos, en donde lo único que hicieron fue unir sus labios en un suave e increíblemente dulce primer beso (entre ambos). Seungcheol sabía que había hecho algo malo, algo demasiado cruel para su amigo, la verdad era que para él, Jeonghan siempre le pareció tierno, lindo y en cierta forma inocente.

–Yo... Lo siento - Se disculpó el castaño. Se daba cuenta que no serviría de nada decir tales palabras, y de nuevo estas hicieron que el rubio entristeciera – No es que no te quiera, Jeonghan... - Hablaba de una manera lenta y mirando su rostro – Yo... - Aún no encontraba las palabras para explicar su sentir - Yo de verdad no esperaba esto... - ¡Rayos!, ¿por qué no podía decir nada coherente?

-Solo di lo que en verdad piensas y sientes, Cheol... - Se escucho la débil voz de Jeonghan casi como un susurro. Él ahora tenía la mirada en el suelo del vehículo, ya no podía seguir mirándolo – Solo di tus verdaderos sentimientos... - Volvió tomar un poco de valor para mirarlo de nuevo una vez más con esperanza en sus ojos cristalinos – Por favor... - Sonrió ligeramente de lado sin llegar a mostrar sus dientes – Por mi - inclinó su cabeza un poco, haciendo un gesto con ellos (pestañear dos veces seguidas).

– Jeonghan ... - Esta vez era el turno de hablar del azabache, su voz mostraba un poco más de valor que antes – No creo poder decirte hoy mis sentimientos...- su mirada está fija en su amigo desde hace ya bastante tiempo, sostuvo su mano y la arrastró hasta su pecho apretándola un poco - ¿Sientes eso?... - Jeonghan al principio no sabía a lo que se refería, hasta que prestó atención en donde se encontraba su mano y pudo sentir el corazón latente de Cheol, lo cual hizo que se sorprendiera y asintiera hacia él - Todo pasó tan rápido que no se qué es lo que está pasando, ¿puedes darme tiempo? - Preguntó en una forma dulce, mientras con su otra mano limpiaba los restos de las lágrimas del pelilargo, el cual asintió en respuesta mientras alejaba su mano de Cheol y abría la puerta para bajar y dirigirse a su casa, pero antes de salir del automóvil escuchó por última vez su voz – Te llamaré. Descansa, Jeonghannie- Esperó hasta que el mencionado entrara a su casa y se marchó del lugar.

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Jessyk94 @ Seventeen México Oficial

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