Ella

La distancia es un demonio que se combate de a dos. Jamás había escuchado tal aberración. Tan estúpida. Aquel vagabundo era solo un troglodita. Mejor me retiro de este basurero. Solo me da asco y pena. Además, estoy a destiempo. Debo apurarme. Ella llegará en cualquier momento.
Si mi reloj está coordinado, ella llegará en tan solo una hora. Estoy tan feliz. Por fin podré verla. Son tres años que estuve esperando por este momento. Al fin la podré conocer. Al fin tendré el honor de ver sus hermosos ojos en persona. De poder decirle que muero por ellos. Que quiero tocarla (en el buen sentido de la palabra) o solo besarla un poco. También le comentaré lo linda que es su sonrisa. Le diré que tan solo ella está en mi vida. Y lo demuestro con todos estos tres años de fidelidad y también tristeza, por una parte. Por la otra, hablar de la niña que planeamos tener. Será alta (como el padre) y cabello castaño (como la madre). No olvidar la sonrisa de oreja a oreja de la madre, y la mirada esquiva del padre. Sí, sería un experimento. (Risas). Pero al final, será nuestra.
Ya solo faltan 10 minutos. Ya casi puedo sentir el calor de sus abrazos (solo imaginados) y el placer de sentirse protegido en sus labios. Puedo verla llegando corriendo, o tan solo gritando. Sí, ella es muy divertida, muy loca. Muy "ella". y si la veo entrando triste, o con una mirada hacia abajo, pues sabré que no es ella. Recuerdo cuando mamá y papá pelearon. Y yo estuve deprimido. Pero ella me levantó el ánimo. Dulces palabras en una nota de voz de 1:30, que la verdad, lo sentí como de tres horas. Pero bueno. Ya no pensar en eso. Ya tan solo 5 minutos.
Ya es el momento. Iré a recibirla.
No es... No es... No es...
Vaya, ya casi son todos.
Bueno. Son todos. No está ella. Quizá viene en el siguiente. Le hablaré al móvil. Por alguna razón no puedo ver su foto de perfil. Eso es raro. Ella nunca lo cambia. Supongo que es el cambio de país. Su código de país no coincide. O, ¿qué sé yo?.
A esperar. Ella llegará.
Han pasado ya dos horas más. Sé que ella llegará en cualquier momento. Ya puedo oír su voz. Algo chillona, pero al final, su voz.
No puedo controlar la ansiedad de tenerla aquí.
Ya son seis horas desde la que ella debió llegar.
Son problemas de la aerolínea. Sé que sí. Al fin y al cabo, siempre tienen problemas. Juro que cuando ella llegue, iremos a reclamar al mismo dueño de la aerolínea.
Ya han pasado muchas horas. Me están retirando del aeropuerto. Iré a esperar afuera. Sería malo si ella llega, y no tiene a dónde ir. Así que la esperaré sentado acá en la acera. Además, ella le tiene miedo a la oscuridad. Debo estar yo para protegerla.
Quizá papá y mamá estén preocupados. Ya cuando les presente a ella sabrán el porqué. Hace mucho frío. Debí traer por lo menos una cafarena. Y una para ella, por si no trajo una. Pero bueno, habrá que esperar que traiga incluso para los dos.
Ha amanecido. Ella aún no llega. No sé porqué, pero la frase que oí ayer, me retumba la cabeza. Me tortura. Me hace daño. Pero la idea de que ya está por llegar, me hace sentir mejor.
Sé que ella vendrá. Tan solo son minutos. La esperaré, si es posible hasta que me salgan raíces.
Ella hizo mucho por mí. Yo haré más por ella. Ella llegará, ella...
Ella es todo para mí.
Ella... Ella... Ella es tan solo ella...