Close Your Eyes/Park Jimin - One Shot

Close your Eyes-Park Jimin

Desde niño siempre ha tenido la sensación de saber como se siente estar enamorado. Tan sólo 8 años, el pequeño niño quien vestía de un short cafe y una camisa de rayas color verde, jugaba con su bicicleta, daba vueltas y vueltas en un parque cerca de su casa; miraba los árboles encima de el, la brisa fresca del otoño se sentía en su cabello y en su cuello, el niño sonrió de felicidad al ver lo que estaba en frente de sus pequeños y rasgado ojos.
De un momento a otro, el pequeño chocó con un árbol, e hizo que se volteara de su bicicleta. El niño sintió caliente en su rodilla. Se aterrorizo al ver ese líquido saliento de su piel, le dolió cuando se intentó tocar en su pequeña y ahora raspada rodilla. El niño peleaba por no llorar, su padre siempre le prohibió llorar por que el decía "Los niños guarpos y fuertes no lloran" esas fuertes palabras decía su padre al verlo llorar por cosas innecesarias para el pequeño.
Unos pasos se escucharon llegar, el niño aún atascado en su bicicleta y con el dolor de su rodilla, trataba con dificultad par a ver aquellos paso acercarse.
Una niña muy bonita se hizo presente, su cabello negro y largo, sus ojos medianos y brillantes, su piel clara y unos labios pequeñitos con un color rosado. El niño tragó saliva al ver aquella hemosa flor frente de él.
La niña con cuidado se acercó a él y con cuidado quitó la bicicleta encima de él logrando que el niño se pudiera sentir libre. La niña se arrodilló hacia el y lo miró atentamente, el niño se quedó planificado al ver ese hermoso rostro cerca de él. La niña saco de su bolsillo de su vestido color coral, un pañuelo. Acercó el pañuelo a la rodilla del niño  y le limpió la sangre que estaba afuera sobre su piel.
El niño se quedó sobre su curación, pero el dolor fue soportable. La niña sonrió al terminar de curarlo, se levantó de su lugar, se acomodó el vestido y se dio la media vuelta y de fue, dejando al niño en el suelo.

Después de ese accidente y de ese día, el niño iba cada día en busca de aquella niña quien lo ayudó. Pero no había señales sobre ella. Pasaron días, semanas, meses y aún así sin ninguna novedad sobre ella.
El niño creció, a la edad de 15 años supo que aquel día se había enamorado por primera vez, ese amor que tan sólo duro 5 minutos, fue su único amor a esa corta edad.. y aun así el tenía la esperanza de volverla a encontrar.

El chico se graduó de preparatoria, el salía a fiestas con sus amigos y muchas chicas estaban detrás de el pero ninguna fue el centro de atención del joven. El no quería nada con nadie, ninguna le llamaba la atención, ninguna tenía ese rayo de luz, esa inocencia que tenía aquella niña de hace años atrás.
El padre del joven le dejó la famosa empresa al su hijo, con la idea de que él se iba a encargar de el. Y así fue.

Ahora el poderoso y multimillonario joven, estaba sentando en su silla de trabajo en su oficina. Estaba tan concentrado con unos papeles frente de él, papeles de la compañía. En su escritorio frente de aquellos papeles a al mano, estaba una figura horizontal rectangular  de cristal con el nombre grabado en el: "Park Ji Min" , si.. era ese poderoso Jimin con la edad de 21 años, era ese mismo niño de tiempo atrás.. el mismo niño quien había sido enamorado por primera vez.

Unos toques fuertes se hicieron presente en la puerta de su oficina, el joven Jimin respondió con un "adelante".

—Una chica viene a buscar trabajo...
Dijo la Secretaría del Joven, Jimin miró a su empleada y asintió con la cabeza y volvió con sus cosas.

De pronto una chica muy ordinaria apareció, llevaba un pantalón de mezclilla y una blusa polo color azul cielo, su cabello largo y lacio color negro se hizo presente, su piel blanca hacia resaltar sus ojos negros profundos, y esos labios carnosos y rosados.

—Buenas tardes Joven Park Jimin.
La chica saludó de forma muy formal  inclinada hacia adelante y con una sonrisa hermosa, sincera e inocente.
Jimin no la miró, sólo la escuchaba mientras seguía con sus papeles y firmando cosas.
El Joven soltó un suspiro.

—siéntate.
El Joven ordenó, la chica sin entender se sentó lentamente, admirando el escritorio del Joven Jimin. En aquél escritorio había dos fotos, una de su familia en la playa y otra con sus amigos en cima de una montaña.
La chica sonrió mirando ls Bellas fotografías.

—¿A qué has venido?
Pregunto Jimin en forma de cansancio
La chica se asustó por su pregunta, parpadeo varias veces y se acomodó un mechón de su cabello rebelde detrás de su oreja.
—Amm... Venía a buscar trabajo.
El joven dejó sus papeles a un lado, con frustración en su mente.. se agarró el puente de su nariz cerrando su ojos.

—¿Qué especialidades tienes?

—¿Disculpe?
El Joven soltó un suspiro.

—¿En que eres buena?
La chica entendió y sonrió.

—Me gradué de contadora, tengo el título como Administradora de empresas y de Comunicación.
La chica con sus manos debajo del escritorio, se tronaba los dedos de nervios, ella ha estado en muchas entrevistas pero en ninguna la había aceptado.

—Bien.
La chica no entendió a lo que el quiso decir.

—¿Bien?
El Joven por primera vez la miro, sus ojos clavados en ella y su respiración se entrecorto. Se enderezo en su asiento para mirarla con atención, la chica no sabía por qué la reacción hacia ella. Estaba confundida.

—¿Cómo te llamas?
El Joven se acomodó su corbata, no podía dejar de verla.

—SoMi, Jeon SoMi.
Respondió ls chica sonriente.

—¿De dónde eres?

—De Canadá pero me vine aquí a Busan cuando tenía 3 años de edad.
La chica sonriente respondido.

El Joven Jimin no sabía lo que tenía en frente de ella, de muchas preguntas más, no dudó ni dos veces en darle trabajo, ¿Por qué? Por que era ella, era esa niña de haces años, nunca podría olvidar esa sonrisas y esas facciones, otras chicas a su edad: se cambiarían de cabello o se harían una operación plástica.. Pero ella seguía intacta, sólo cambiarían su cuerpo.. por que a esa edad de ella toda mujer cambia y a ella si que dio un gran cambio.
¿Cuál era el trabajo que le habían dado?
Su nueva Secretaría personal y asistente personal, y claro.. le dio una oficina como la de él.

De ahí en adelante, Jimin se ha vuelto mas felíz, mostraba todos los días esa sonrisa que nunca mostaba, por que él planeaba mostrarla cuando estuviese enamorado.. y así fue.
Jimin, en vez en cuando la miraba a escondidas como hacía su trabajo. El sonreía como un loco enamorado.
Un día de esos, el se armó de valor y le pidió salir con él. Somi, no sabía si eso era verdad o no.. Pero ella acepto insegura.
Él se vistió bien para ella, con una ropa que hace años no usaba: casual. Él vestía de unos pantalones de mezclilla y una camisa blanca, peino su cabello negro y se puso su colonia. A ese atuendo y todo de él.. vestía muy atractivo.
Ella, vestía de un pantalón de mezclilla azul marino, y una blusa color y una blusa del mismo color que Jimin: Blanca.
Jimin la llevo a muchas partes, a la playa, al zoológico y a un restaurante de Ramen. Mucha gente al verlos, decían que era la hermosa pareja de pudieron haber visto, y ellos se rieron, 1. No eran pareja 2. Era su jefe 3. Era su empleada 4. Eran sólo amigos.
A Jimin se puso un poco triste al saber que no eran nada.. que sólo eran amigos.. compañeros.
Pero Jimin se armó de valor y le declaró sus sentimientos. Como buen hombre.

—No he dejado de pensar en ti..
Dijo Jimin poniendo sus manos en su bolsillos de su mezclilla.
Los nervios de él crecian mas y más.

—Eres Magnífico.
A Jimin se le soltó una sonrisa, no se esperaba eso.

—tengo algo que decirte..

La chica se siento nerviosa, su corazón le palpitaba muy rapido.
Somi soltó una sonrisa

—sueltalo.

—Se mi novia.

Jimin cerró los ojos, hizo puños sus manos de nervios por su respuesta.
Sintió unos labios en los suyos, a Jimin se sorprendió y le correspondió de la misma manera.
Despues se separaron y ella susurró.

—me encantaría.

Después de ahí, la vida de Jimin dio la vuelta a 180°, nunca imagino que aquella niña de hace años, aquella niña por quien Jimin lloraba por las noches culpandose por dejarla ir. Ahora la tenía a su lado.
Y eso sólo pasó en un abrir y cerrar de ojos.