Enamoremos a los Leigh

1. Los Wyler - parte 1

Probando... 1, 2, 3... ¡Hola! Bienvenido a mi nueva historia, espero que te guste... Esto es solo una prueba.

Y Chao, te dejo leer...
....

Ariane suele despertar muy temprano sin necesidad de un despertador; aunque cada noche y sin falta se encarga encender el suyo y al día siguiente se asegura de levantarse antes que suene.

Esta mañana se levanta orgullosa de haberle ganado al apartijo, ¡Si! ... Sigue manteniendo su récord. Después de diez minutos rodando en su cama de sabanas y colcha rosas finalmente se dirige a su baño personal.

No tiene que lidiar con pleitos y gritos por quien tome el baño. Su padre también tiene baño personal y su hermano Peter toma el de huéspedes como si fuera solo para el.

En su casa son solo ellos tres, el divorcio fue hace seis años. Los mellizos apenas iban a cumplir once y en realidad no les tomo por sorpresa. Ninguno se arrepiente de la decisión, los cuatro son felices. El trío inseparable viviendo en Boston y su madre jugando con su espíritu de Pocahontas dejando que el viento la guíe a donde sea.

Ariane se mira al espejo por un largo rato, con ambas manos estruja su rostro de un lado al otro. Tiene una cara ovalada, unos ojos verdes y un cabello rubio que llega debajo de sus pechos. Esos pechos son pequeños pero no inexistentes, es bastante bajita algo que dejo de acomplejarle cuando supo sacarle provecho.

Esta terminando su ducha cuando la música de Fleetwood Mac hace su aparición colándose en las paredes.

Peter esta despierto.

Peter Wyler es menos ordenado al despertar, el volumen en su alarma podría escucharse en media China.

Suele holgazanear hasta el último minuto y salir desnudo corriendo hasta el final del pasillo donde se encuentra el baño. El chico duerme sin ropa desde que supo ir al baño solo y no tiene vergüenza alguna.

"¡Buen día papá!" Grita mientras cubre sus partes íntimas con sus manos.

Henry Wyler rueda los ojos viendo el traserillo pálido de su hijo perderse tras la puerta del baño... Chico extraño, algunas veces piensa que Ariane le robo toda inteligencia y sentido común al pobre de su hermano cuando estaban en el vientre de su madre.

Más tarde están listos justo a tiempo para el desayuno. Peter tiene sus jeans oscuros, una camisa de botones que se pega obscenamente a sus músculos y encima su chaqueta del equipo con colores rojo y dorado. Ariane tiene puesto su uniforme de animadora, el conjunto consiste en una pequeña falda roja con franjas doradas y blancas  que hacen juego con un suéter que tiene el "Lions" bordado con colores blanco y dorado.

Peter ataca su plato con waffles y el tocino. Ariane come un plato de melón y la mitad de una toronja. Ambos miran a su papá leyendo el Boston Globe a pesar de que lo odia. El hombre gruñe mirando el papel, los chicos cuentan es su mente, 134, 135, 136, 137...

Henry lanza el periódico a una silla vacía y toma su Ipad aun lado de su desayuno. Gracias al cielo por la subscripción al New York Times.

"Casi 138 segundos, un nuevo récord papá, cada vez te desespera mas ese periódico." Ariane dice con voz cantarina. Peter sonríe con las mejillas llenas de comida. "Papi." Oh no. Henry conoce ese tono y nunca trae nada bueno. — "Sabes... Ayer fui a hacerme la manicura... Josefine estaría muy contenta de que la invitaras a salir."

Esa pequeña diablura con coleta rubia y ojitos verdes parpadeando hacia el. Tratando de convencer a papá de salir a una cita... intentó número ¿28?