NERD ↪V-HOPE

十九

TAEHYUNG POV

Caminaba hacia mi casillero, era la penúltima hora de clases, la mayoría de los alumnos con los que cruzaba para llegar a mi destino, se quejaban de ello. En lo personal, a mí no me importaba, me encantaba la escuela, y aún más desde que conocía a Hoseok.

Cuando por fin estuve frente a la puerta de metal, giré la perilla colocando los números de la clave para poder tomar los libros de mi siguiente clase, en este caso, biología. No era una de mis materias favoritas, pero, no adoptaba una actitud negativa, como la mayoría lo hacía.

Tomé los libros que necesitaba, y por supuesto, dejar los de la clase anterior, pero, cuando iba a cerrar mi casillero, alguien más lo había hecho.

— Hola, Kim — era Jung Kyuh. Estaba con sus amigos, riéndose de quien sabe qué.

— Buenos días Kyuh — respondí amablemente abrazando a mis libros. Tengo que admitir que sentía algo de nervios en estos momentos, él nunca me hablaba para algo bueno.

— ¿Cómo estuvieron tus vacaciones? — tragué saliva antes de responderle. No quería decirle alguna estupidez que le irritara.

— Estuvieron bien, gracias por preguntar.

Él se quedó en silencio. No me moví de mi lugar, pero, la clase empezaba en menos de cinco minutos, y nunca me gustó llegar tarde.

— Lo siento, tengo que ir a clases — iba a comenzar a caminar, hasta que, Jung Kyuh me tomó del brazo, para regresarme de donde me había movido de forma brusca, lastimándome.

— ¿A dónde crees que vas, rarito?

Me quedé callado, mis piernas comenzaron a temblar ante sus palabras. Hacía mucho que esto no ocurría, más exactos, desde que Hoseok y yo nos hicimos cercanos.

— Y-Yo — respondí tartamudeando como un idiota — a-a clases.

— ¿Y te he dicho que puedes irte? — preguntó y yo negué — exacto, no.

— L-Lo siento — hice una pequeña reverencia, sintiéndome estúpido, pues, yo no recuerdo haber hecho algo malo, sólo quería ir a clases y estar con Hoseok y los demás.

— Kim, tan idiota como siempre — carcajeó, sus amigos hicieron lo mismo, comenzaba a sentirme asustado, no había nadie cerca, la campana sonó hacia menos de diez minutos, solo estábamos ellos y yo.

— ...

— ¿No vas a responderme?

— ...

Lo siguiente que pasó fue que, me tomó fuertemente del brazo y me estrelló contra los casilleros. Mis ojos comenzaron arder, quería llorar y salir corriendo. Nunca entendí que es lo que había hecho mal desde la escuela primaria para que las personas me trataran de esa forma, yo suelo ser amable, pero, no puedes agradarle a todo el mundo.

— Creo que deberías domesticarlo Kyuh — uno de sus amigos sugirió, Jung Kyuh soltó una carcajada asintiendo. ¿Domesticarme? ¿Me creía un... perro?

— Lo siento, lo siento, lo siento — repetí varias veces.

— Tan patético — escupió sin una pizca de dulzura.

— Yo solo quiero ir a clases — me temblaba la voz, ellos lo notaron, y las carcajadas inundaron el silencio del pasillo, rogaba en mi interior que un maestro cruzara o que... Hoseok apareciera.

— ¿Te crees intocable sólo por ser el perro faldero de Hoseok?

Eso fue todo, las lágrimas se deslizaron por mis mejillas tan rápido, sus risas se hicieron más intensas, me sentía nuevamente humillado.